El llamado Plan C está a punto de ser una realidad gracias a que los candidatos de Morena y sus aliados para el Senado consiguieron arrebatar escaños a la oposición en las entidades que históricamente habían dado la espalda a la cuarta transformación y a que aumentaron su votación en al menos ocho entidades clave respecto a 2018.
De acuerdo con los resultados del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) en cuatro estados gobernados por el PAN y Movimiento Ciudadano, los morenistas lograron ganar por mayoría relativa y de esta manera captaron seis senadurías adicionales a las que obtuvieron en las pasadas elecciones presidenciales: Nuevo León (2), Yucatán (2), Guanajuato (1) y Jalisco (1).
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El mayor avance se registró en Nuevo León, donde la fórmula integrada por los morenistas Waldo Fernández y Carlos Humberto Suárez se perfila para obtener los dos escaños de mayoría y de esta manera dejar únicamente una senaduría disponible para la oposición como segunda fuerza.
En las elecciones federales de 2018, los representantes de Morena no consiguieron ninguna senaduría, por lo que este resultado representa un gran avance cuantitativo hacia la meta del Plan C impulsado desde Palacio Nacional.
En Yucatán las candidatas de Morena, Verónica Camino Farjat y Celia Maldonado, tuvieron un triunfo todavía mayor al acaparar el 51.2 por ciento de la votación en este territorio gobernado por el PAN y donde hace seis años no consiguió ningún escaño.
En Guanajuato y Jalisco los abanderados Morena alcanzaron a ser segunda fuerza en las elecciones federales de 2018 y obtuvieron un escaño por cada entidad, pero en 2024 ganaron las elecciones de mayoría relativa y contarán con dos senadurías de por cada demarcación.
La fórmula integrada por Ricardo Sheffield y Diego Sandoval consiguió lo que antes del domingo era imposible: que la izquierda ganara en el bastión histórico del panismo y con esto relegar a la oposición al segundo lugar.
En Jalisco la dupla de Carlos Lomelí y José Torres obtuvo el 40% de la votación y desplazó al segundo lugar a la alianza del PAN-PRI-PRD y dejó sin oportunidad de que los abanderados de MC alcanzaran un escaño en el Senado, pese a que Jalisco es reconocido como el baluarte del “movimiento naranja” en el país.
Adicional a los buenos resultados en territorios gobernados por la oposición, la alianza entre Morena, PT y PVEM trazó un plan de competir por separado en 12 entidades federativas para tratar de ganar los dos escaños al Senado por mayoría relativa y el otro asignado a la primera minoría en cada demarcación.
El proyecto únicamente funcionó en Chiapas, Oaxaca y San Luis Potosí donde se llevaron el carro completo de senadurías y aumentaron en cuatro escaños lo que habían conseguido en esos territorios durante las elecciones de 2018.
En las otras nueve entidades el plan solo les permitió mantener los 18 escaños que habían logrado de mayoría relativa en 2018 tras repetir como ganadores en este 2024.
Entidades claves
Para amarrar el Plan C tanto en Cámara de Diputados y el Senado, Morena y sus aliados trazaron un plan para incrementar su votación general en nueve entidades clave respecto a lo obtenido en las elecciones donde resultó victorioso Andrés Manuel López Obrador. Buscaban ganar 21 millones de votos en esos territorios, pero se quedaron muy cerca de la meta al conseguir casi 19 millones.
En la Ciudad de México, el mayor bastión del obradorismo en el país, los morenistas esperaban conseguir 3.5 millones de votos, pero en realidad obtuvieron 2.9 millones.
En Jalisco calcularon 1.8 millones de sufragios y se quedaron cortos por 200 mil votos; en Michoacán esperaban 1.3 millones y les faltaron 300 mil sufragios; en Chiapas proyectaron 1.9 millones de votos, pero se quedaron cortos por 400 mil y en Veracruz esperaban tener una votación de 2.5 millones y únicamente les alcanzó para lograr 2.2 millones.
Pese a no llegar a la meta de votación, en estas cinco entidades Clauida Sheinbaum tuvo más votos que Xóchitl Gálvez y solamente la Ciudad de México tuvo un retroceso de 131 mil votos respecto a los sufragios obtenidos por López Obrador en 2018.
En donde sí se cumplieron las proyecciones fueron en el Estado de México, Oaxaca, Puebla y Guanajuato al conseguir 5, 2, 2 y 1.2 millones de votos respectivamente.
aag