La Consejera Electoral del INE, Dania Paola Ravel Cuevas, dijo la institución electoral no puede actuar de manera directa para brindarle protección a los candidatos; y, que con respecto a la seguridad de sus acompañantes, “no puede actuar como intermediario porque la ley no se lo permite y, recordemos que nos tenemos que regir por el principio de legalidad”.
De esta manera también dijo que las y los consejeros electorales “no cuentan con atribuciones en materia de seguridad”. Sin embargo, afirmó que pueden actuar como intermediarios mediante la Presidencia del Consejo General del INE.
De igual forma, señaló que de acuerdo con el artículo 218 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, el INE puede solicitar a las autoridades competentes una “petición expresa” de las personas candidatas y partidos políticos. Dijo en entrevista para MILENIO Televisión con Tanía Díaz y Luis Carlos Ortiz.
Ante la pregunta sobre sí hay un mapa de riesgo para determinar dónde es necesaria la seguridad, dijo que “cualquiera puede hacer la solicitud, cualquiera que considere que la requiere. Y digamos que, este análisis de riesgo lo hace la Guardia Nacional una vez que se remite la solicitud, formulan el análisis de riesgo a través de la Guardia Nacional”.
“Es información reservada que así se contempla también por las leyes de transparencia porque justamente dar a conocer ese tipo de información puede poner en riesgo las estrategias de seguridad que tengan las autoridades competentes”.
También hizo un llamado a la ciudadanía para que “le abran la puerta” a las y los CAES que “van a estar plenamente identificados con sus chamarras, con playeras que tienen un código QR para que la ciudadanía pueda verificar que, efectivamente, se tratan de CAES, y, además, van a traer un gafete con un sello de la junta distrital de efectiva respectiva”.
Y con respecto a la seguridad de estos mismos dijo que: “por eso se instalan en cada elección de mesas de seguridad”. Indicando que la de este proceso electoral se instaló en diciembre del 2023, todo con el fin de, tener comunicación constante y que se pueda saber qué están haciendo aquellos que desempeñan este “trabajo de campo” y, asimismo, garantizar el cumplimiento de su labor sin poner en riesgo su integridad física.
LG