A pocas horas del 2 de junio, el Instituto Nacional Electoral (INE) todavía tiene 250 vacantes de capacitadores asistentes (CAE) y de supervisores electorales (SE), los cuales deberían hacerse cargo de: la instalación de casillas, el acompañamiento en la cuenta de votos y el envío de los resultados para los Conteos Rápidos y alimentar el PREP.
El Acuerdo Nacional por la Integridad Electoral entregó su cuarto informe que abarca la última parte de observación del proceso votante, en el que alertaron sobre los riesgos por las renuncias y vacancias de CAES y SE, la violencia y la división al interior de las autoridades electorales, lo que advirtieron, pondría en riesgo la integridad del proceso.
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El informe sólo fue recibido por las consejerías de: Claudia Zavala, Dania Ravel, Carla Humphrey, Martín Faz, Arturo Castillo y Jaime Rivera, quienes destacaron que recibir las críticas es parte de la democracia y respondieron a varias de las observaciones.
La politóloga Karolina Gilas explicó que la primera preocupación es la renuncia de funcionarios de CAES y SE a lo largo del proceso electoral, pues destacó que:
“Es una de las más difícil de enfrentar porque se dan a pocos días de la jornada electoral, lo que podría afectar la instalación correcta de las casillas y el cierre de las mismas”.
El consejero Martín Faz, presidente de la Comisión de Organización y Capacitación Electoral, explicó que este es un tema que los ha preocupado y ocupado, pues nunca lo habían enfrentado “con tanta crudeza como en este proceso electoral”, además agregó que las vacantes se han dado en esta ocasión por diferentes motivos.
“Emitimos más de mil 300 convocatorias para supervisores electorales cuando antes emitíamos 700 o menos, pero esto tiene qué ver con otros elementos".
“La semana pasada traíamos casi mil entre CAES y SE, pero a raíz de estas medidas que tomamos, hoy solamente traemos 250, es decir, ya acortamos a una cuarta parte y esperemos que de aquí al domingo lo podamos resolver, pero efectivamente se han presentado fenómenos muy atípicos como éste”, añadió.
Sin embargo, Faz destacó que siguen trabajando y tomando las medidas extraordinarias que fueron aprobadas la semana pasada, para que se puedan cubrir estos espacios y que ninguna casilla esté en riesgo por falta de personal electoral.
La consejera Dania Ravel consideró incluso que además de la mejora en los salarios, se debería plantear una legislación para que el INEGI no interfiera con las elección, esto afectó el reclutamiento puesto que les ofrecían mejores condiciones laborales.
“Se tiene que plantear una mejora de salarios, como también se tiene que plantear una cuestión fáctica con el INEGI que en este momento está haciendo una encuesta económica y generalmente, esas personas que están haciendo las encuestas es el mismo que trabaja con el INE siendo CAES y supervisores, estamos compitiendo con el mismo mercado".
“Creo que debería haber una legislación que incluso beneficiaría a estas personas, para que cuando termine una actividad empiece la otra y no ocurra al mismo tiempo”, agregó.
Ravel mencionó que otra de las principales preocupaciones es la seguridad, pues el informe indica que:
“En el desarrollo del proceso se dieron 320 eventos violentos incluyendo 93 asesinatos, de éstos 36 de personas candidatas (...) además, de un número importante de renuncias de candidaturas ante presiones y violencia política”.
Alertan que divisiones internas afectan la integridad del proceso
El informe del Acuerdo Nacional por la Integridad Electoral también alertó como un tercer riesgo, la división interna entre el INE y el Tribunal Electoral, así como las vacancias de magistraturas electorales.
“El tercer riesgo es la capacidad de arbitraje de las autoridades electorales en la etapa de impugnaciones y calificación de los comicios, la integración incompleta de todos los Tribunales Estatales y Federales en todas sus salas, en especial la sala superior que deberá calificar la elección presidencial que estimamos que enfrenta un factor de incertidumbre y posibles cuestionamientos de legitimidad”.
Esta división quedó nuevamente exhibida incluso en la presentación de este informe, puesto que solo el bloque mayoritario acudió a recibirlo, mientras que la consejera presidenta, Guadalupe Taddei y sus consiliarias más cercanas no acudieron.
Las consejerías presentes coincidieron en que no deben rehuir de la crítica, sino por el contrario, coordinaron en escuchar a los expertos y atender las observaciones para mejorar el proceso electoral.
Para finalizar, María Marván destacó que: “la confianza de la sociedad se gana micra a micra y cuando se pierde, se pierde por kilómetros, pero confío en que el 2 de junio, la ciudadanía salga a votar".
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IAZD