Con 260 votos a favor, 193 en contra y 22 abstenciones, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la derogación del requisito de título profesional para ocupar la titularidad del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Legisladores de Morena y PT calificaron dicho requisito como un “acto de discriminación”, particularmente a indígenas y autodidactas, y acusaron a los representantes del PAN, PRI y PRD de racistas y clasistas por votar contra el dictamen.
A nombre de la bancada priísta, la diputada Cynthia López llamó a rechazar la reforma a la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, pues dijo, no podemos pasar a la historia como una legislatura que solapa la ignorancia.
“A mí me apena mucho que menos de 50 por ciento de los diputados cuente con un título universitario y que muchos de ustedes ni siquiera entregaron sus papeles cuando entraron al Congreso para poder saber, y el hecho de que ustedes no tengan un título universitario no quiere decir que ahora vamos a promover que titulares de organismos tan importantes no tengan un título universitario”, arengó.
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En contraste, el petista Gerardo Fernández Noroña denunció la discriminación que, según él, representa el requisito de título profesional para dirigir el Conapred, cuando ni siquiera se pide a los diputados, senadores y Presidente de la República.
“Yo creo que quien vaya a encabezar el Conapred no necesita más título que el de ser un ser humano con voluntad de servir a la patria y con un enorme cariño a su pueblo, me parece que se debería ser el requisito fundamental”, argumentó.
Por Morena, la diputada Nelly Minerva Carrasco calificó el requisito de título profesional en sí mismo un acto discriminatorio y una “carga desmedida” para los pueblos afromexicanos y comunidades indígenas, cuyos obstáculos para acceder a la educación formal dificultan las posibilidades de concluir estudios profesionales.
En su turno, en representación de MC, la legisladora María Leticia Chávez puso en entredicho la motivación de la reforma, justo después de la remoción de la ex titular de Conapred en un proceso desaseado.
Cuestionó si el cambio es a modo o busca darle entrada a una persona en particular que no cumple con los requisitos, conocimientos ni experiencia, lo cual, dijo, no sería descabellado, pues el actual gobierno ya ha incurrido en la práctica de poner amigos o aliados en puestos que al final “les han quedado muy grandes”.
EHR