El clásico frío de Toluca vistió de un ambiente peculiar la tarde del viernes; una ligera llovizna pintó las aceras húmedas, dejando ver una especie de nostalgia en el centro de la ciudad. La Catedral de San José, perteneciente a una de los diócesis más importantes del Estado de México, completaba una imagen casi inédita para sus habitantes
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Afuera del recinto, las coronas comenzaron a llegar desde la tarde, previo a ello y como es costumbre, se realizaron las tareas de limpieza; agua y jabón preparaban el andar de políticos destacados, representantes empresariales, ex gobernadores y líderes sociales, quienes despedirían al que también fuera mandatario del Estado de México, Alfredo Del Mazo González.
El transcurrir de la tarde parecía habitual, entre el ir y venir de la gente, que en algunos casos se detenía a leer las coronas, algunos más se persignaban y otros pasaban de largo.
Poco a poco, el frente de este icono arquitectónico fue llenándose de flores blancas, vestían con un color especial esta fecha triste para la familia del gobernador Alfredo Del Mazo Maza, y para el resto de la clase política.
A diferencia de otros días, en los que el centro de la capital mexiquense ha lucido prácticamente sin autos debido al desabasto de combustible, este viernes el desfile de camionetas, patrullas y vehículos oficiales generó tránsito como si fuera hora pico.
¡Ya llegó!, ¡mira!... eran las expresiones de la gente que salía de las dependencias de gobierno; el luto comenzó a sentirse.
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La llegada de los servicios funerarios fue aproximadamente a las 18:00 hora. El mandatario estatal dejó ver una expresión de dolor, de tristeza; detrás del féretro entró al edificio que guarda la fe de los toluqueños.
Acompañado de su esposa, Fernanda Castillo de Del Mazo, así como de familiares cercanos, se dispuso a escuchar las palabras del obispo de Toluca, Francisco Javier Chavolla Ramos, quien ofreció un mensaje de resignación.
La catedral estaba llena de integrantes del gabinete estatal, funcionarios públicos, representantes empresariales y personalidades destacadas, aunque sus puertas también estuvieron abiertas al público en general, quienes en una suerte de curiosidad se acercaban.
El viento y frío de Toluca despidieron a uno de los gobernantes más recordados, Alfredo Del Mazo González, quien no solo dejó un legado político importante, sino también instituciones que han permanecido en beneficio de la población.
KVS