Habitantes de la localidad de Bocja, municipio de El Arenal, se manifestaron en el Congreso del estado para exigir justicia y seguridad tras la explosión del pasado 1 de abril en un establecimiento de la comunidad.
“Pedimos justicia por el cobarde atentado con explosivos a las familias de la comunidad del Bocja”, decía una manta con la que ingresaron los pobladores al salón de Plenos de la LXIV legislatura. Señalaron que aunque no hubo lesionados ni víctimas en la explosión, sí se presentaron casas dañadas y vidrios rotos.
Tras lo sucedido, los habitantes llamaron a las autoridades correspondientes, incluso al Ejército para que tomaran cartas en el asunto; sin embargo, agregaron que no han hecho nada hasta el momento.
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Afirmaron que un atentado de esa magnitud no se puede permitir en el país, “donde fue el atentado había entre cuatro y cinco niños, por milagro de dios no los mataron”.
Agregaron que los afectados fueron la familia Zúñiga Fuentes, quienes son dueños del establecimiento, una tienda. “No sabemos quiénes llegaron (a atacar), para eso están las autoridades, para investigar el atentado que cometieron a esa familia y la comunidad”, dijeron.
Afirmaron que ahora todos en la localidad viven con una psicosis, “de que cómo pueden permitir las autoridades de que pase eso ahí, un terrorismo, un atentado, fueron como cuatro o cinco explosivos de dinamita”.
Apuntaron que de acuerdo con las primeras investigaciones de los peritos se trató de dinamita con mechas largas lo que explotó en la tienda.
Al respecto, la diputada local de Morena, Tatiana Ángeles Moreno, planteó ante el Pleno del Congreso del estado un acuerdo económico y que con ello se exhorte a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) para que la investigación sea canalizada a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada para que se dé celeridad a la investigación y se castigue a los responsables.