Facultades de la UANL, al rescate de nueva realidad

Problemática. Algunas instituciones analizan habilitar aulas para que los jóvenes puedan continuar con su carrera; prevén brindar apoyos a estudiantes que no cuenten con herramientas tecnológicas.

Sugirieron a los jóvenes a ser tolerantes y humanitarios, y “darle chanza” a los profesores que no están familiarizados con la tecnología. Jorge López
Kevin Recio
Monterrey /

La Universidad Autónoma de Nuevo León se prepara para iniciar el 31 de agosto las clases online para una población de más de 200 mil alumnos, con el desafío de dar abasto a la demanda de clases a distancia a través de sus plataformas propias.

Y aunque la mayoría de los alumnos puede ingresar a las plataformas digitales para tomar sus clases, existe un porcentaje muy bajo de estudiantes que no cuenta con los recursos tecnológicos para conectarse.

Por ello, las facultades de Derecho y Criminología, Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales y Trabajo Social analizan habilitar algunas aulas para que los jóvenes puedan continuar con la carrera.

Lo anterior podría ser implementado siempre y cuando el Semáforo Estatal de la Secretaría de Salud así lo indique; no obstante, las instituciones se declararon listas, pero con diferentes modalidades presenciales.

Entrevistados por separado, los directivos de las facultades de Derecho y Criminología, de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales y de Trabajo Social, Óscar Lugo Serrato, Abraham Hernández Paz y Laura González García, respectivamente, revelaron que cerca del cinco por ciento de los alumnos enfrentó alguna problemática tecnológica, lo que ocasionó su baja momentánea.

Lugo Serrato, director de Facdyc, explicó que originalmente existía un plan para que los alumnos recuperaran algunas materias durante este mes, pero al presentarse más de 800 contagios diarios de coronavirus decidieron cancelar todas las clases de manera presencial hasta nuevo aviso.

Se informó que la Facultad de Derecho tiene la capacidad para impartir diversas clases presenciales con estrictas medidas sanitarias para los alumnos que carezcan de computadora.

“Estamos listos para hacerlo, pero debido a la contingencia pues no se permitieron las clases presenciales. En cuanto se pueda y cambie el semáforo, claro que se podrá, ya que tenemos el espacio suficiente para que alumnos puedan tomar clases aquí”, refirió.

Dijo que un 95 por ciento de los alumnos terminó el ciclo pasado, mientras que el otro 5 por ciento optó por darse de baja y reinscribirse el semestre entrante.

Lugo Serrato detalló que al tener matriculados a 12 mil 688 estudiantes se ordenó una capacitación constante a los 814 profesores, con el fin de que el alumnado tenga una preparación a distancia.

“La UANL implementó dos talleres; uno en Teams y otro en Nexus. El 70 por ciento de los profesores utilizó esas dos herramientas, pero como el objetivo era poder continuar con la oferta educativa el 20 por ciento usó Zoom, Google Meets o Classroom, y el 10 por ciento hizo uso de correo electrónico y redes sociales”.

“Esto último no se podrá para el próximo semestre, ya que forzosamente tendrá que usarse Teams o Nexus”, indicó.

Para el próximo semestre que se avecina, señaló, se inscribieron 3 mil 600 personas interesadas en cursar una de los dos licenciaturas que ofrece Facdyc, pero solo mil 900 lograrán ingresar a dicha institución.

En contraste, Trabajo Social, a cargo de Laura González García, reveló que de los mil 600 alumnos que tiene matriculados, ocho se dieron de baja, al no tener computadora o tablet que le permitiera conectarse a las clases, pero ellos no perdieron su semestre.

“Se les ayuda, porque a ellos esperábamos darles un curso intensivo ahora en julio, pero como cambió el semáforo no fue posible realizarlo y se les dio la oportunidad de reinscribirse en agosto; claro que se les apoyará con una beca al 100 por ciento, porque ya se habían inscrito”, aseveró.

Incluso, la directiva planteó que a los ocho alumnos se les podría recibir en la facultad, con el fin de que no pierdan el semestre, siempre y cuando la autoridad lo considere pertinente; la propuesta, dijo, constaría de un alumno y profesor por aula, por lo que se descartarían aglomeraciones de personas en un salón.

“Esperamos recibirlos aquí, aunque sea uno en cada salón, pero darles la clase a los ocho en caso de que sea posible de acuerdo a la Secretaría de Salud y los recibimos”, enfatizó.

Debido a que la mayoría de las evidencias realizadas por los alumnos de Trabajo Social es de carácter presencial, la pandemia no fue impedimento para no tratarlas, pues bastó con realizar una videoconferencia entre los alumnos y las personas que requerían ayuda.

“Hay proyectos de comunicación familiar mediante videollamadas por Zoom; estamos conscientes que no es lo mismo el contacto humano, lo preferimos presencial, y queremos volver a esto”.

“José Ricardo González, uno de los decanos de la facultad, tomó sus cursos (online), y de inmediato comenzó a dar las clases y esto nos sorprendió, aunque tenemos otros maestros que también le entraron a esto de la tecnología”, afirmó González García.

Trabajo Social estimó que podrían ingresar 100 alumnos más a la institución, luego de que se inscribieron para presentar el examen de admisión.

Es importante señalar que la Facultad de Trabajo Social tiene un cuerpo académico de 92 profesores.

El director de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, Abraham Hernández, reportó que 30 de los 5 mil 500 alumnos tuvieron algún problema para conectarse a las clases, por lo cual sugirió que estos acudan a la facultad y tomen la materia en las computadoras cuando Salud lo

indique.

“Creo que el verdadero reto es que realmente las materias tengan ese sentido humano y que el alumno aprenda. Sabemos que es una de las incertidumbres que existe entre nosotros, los padres de familia, alumnos y hasta la misma universidad.

“Nos agarró fuera de base, te estoy hablando que antes estábamos al 20 por ciento de la capacidad a distancia y llega esto (la pandemia), y tuvimos que hacerlo al 100 por ciento a través de internet”, detalló el directivo.

Abraham Hernández agregó que la carrera más versátil es la de Ciencias Políticas, ya que cualquier egresado puede importar o exportar desde casa, como parte de los talleres que ofrece la institución para que los jóvenes emprendan.

Detalló que en primera instancia ordenó capacitar a los 200 maestros, al considerar que el mayor desafío de Ciencias Políticas se sitúa en que las materias no pierdan el sentido humano.

Para el examen de admisión se inscribieron mil 200 personas, de las cuales se espera que la mayoría logre ingresar.

La Facultad de Ciencias Políticas tiene 5 mil 500 alumnos, de los cuales el 70 por ciento estudia Relaciones Internacionales y el otro 30 por ciento corresponde a Ciencias Políticas, Administración Turística o Administración de Energía.

Las tres facultades recomendaron a los jóvenes a ser tolerantes, y “darle chanza” a los profesores y compañeros que no están familiarizados con la tecnología, por lo que solicitaron compresión académica.

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