La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México llevó a cabo un Acto de Reconocimiento de Responsabilidad, esto derivado de la Recomendación emitida por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, en donde se reconoce que la dependencia cometió violencia institucional con motivo de la investigación de casos de violencia familiar y tentativa de feminicidio.
Durante su intervención Ulises Lara, reconoció las falencias traducidas en deficiencias y malas prácticas ocurridas por la actuación de quienes tenían la responsabilidad de garantizar una investigación eficiente para las víctimas.
“Señora Nadia Daniela Sánchez Martínez y señora Karla Daniela García Tello, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, por mí conducto, y a nombre de todo su personal, con un profundo sentido de humanidad, sensibilidad y debido respeto, reconoce su responsabilidad por las omisiones cometidas por el personal de esta Fiscalía que derivó en la violación a sus derechos humanos”.
Asimismo, se comprometió a implementar medidas para evitar que se repitan casos como estos y, además, destacó que se ha modificado la estructura orgánica de la Fiscalía para reforzar la protección adecuada y la atención del riesgo, así como la investigación con debida diligencia, como parte de la obligación institucional para proteger a las víctimas de violencia de género y evitar malas prácticas.
Por su parte, la víctima y sobreviviente de violencia familiar, Karla Daniela García Téllez, denunció que no se ha garantizado su seguridad como persona y la reparación de su vida tras vivir violencia feminicida junto con su hijo y en este sentido lamentó que existan funcionarias y funcionarios públicos que no son empáticos y sensibles con las víctimas de delitos, porque carecen de perspectiva de género, por lo cual, la revictimización es constante.
Durante su intervención, la también sobreviviente y víctima de violencia de género, Nadia Daniela Sánchez Martínez, aseveró que las personas servidoras públicas que omiten, obstaculizan, retrasan o impiden el pleno ejercicio de los derechos humanos, también cometen un delito.
“En México, las mujeres se tienen que atrever a denunciar a sus agresores; sin embargo, por las deficiencias técnicas estructurales y la discriminación, no son escuchadas y protegidas adecuadamente por las autoridades cuando son víctimas de violencia”.
Bajo este contexto y en calidad de testigo social, Wendy Figueroa, directora de la Red Nacional de Refugios A.C., afirmó que todos los días en el país son asesinadas más de 10 mujeres a manos de quien dice amarlas; y en el 99 por ciento de los delitos existe impunidad, mientras que el 40 por ciento de los feminicidios que se cometen pudieron prevenirse; por lo cual hizo un llamado a las autoridades para reconocer que la violencia familiar es un delito grave, porque es la antesala del feminicidio.
LG