Save the Children en México advirtió que niñas y niños migrantes están en peligro, pues podrían estar expuestos a "riesgos importantes como la violencia, el abuso, afectaciones graves a su salud física y mental e incluso la separación familiar", señaló la CEO de la organización, Maripina Menéndez Carvajal. Por ello, hizo un llamado al gobierno mexicano a reforzar las acciones operativas de Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) y Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, entre otras.
Con el anuncio del fin del Título 42, más de 15 mil personas, incluyendo menores de edad, han llegado a las principales ciudades fronterizas de México, con la esperanza de cruzar hacia Estados Unidos. Sin embargo, la gran mayoría de familias migrantes se encuentran durmiendo en las calles o en albergues que ya están saturados.
"La situación puede ser muy crítica, podríamos decir que son casi cuatro mil niñas y niños los que están expuestos a riesgos importantes como la violencia, el abuso, afectaciones graves a su salud física y mental e incluso la separación familiar, si quienes los acompañan ven imposible acceder de manera segura y pronta a los Estados Unidos. Las familias están desesperadas y muchas de ellas pueden estar dispuestas a arriesgar sus vidas al intentar cruzar la frontera por puntos peligrosos como el desierto o el río Bravo", afirmó Menéndez Carvajal.
De acuerdo con la organización, estos se encuentran viviendo una situación de ansiedad, miedo e incertidumbre, pues "han emprendido un viaje bastante largo desde sus países de origen huyendo de la violencia o la pobreza", lo que ocasiona que el estrés en el que se encuentran incrementa, al no tener claridad sobre lo que les puede deparar en el futuro.
En medio de este escenario, la organización compartió la historia de Pedro, un niño de apenas ocho años proveniente de Honduras.
"Lo del Título 42 es algo que se va a terminar y el Título 8 está próximo a iniciar. No sé de qué trata, sólo veo que las personas se salen y dicen que se van a entregar, espero que esto pronto acabe y mejor que ya quiten el muro, es como un delito, porque todos tenemos derecho de ir a donde queramos".
Mientras tanto, los padres no pueden encontrar una explicación que le puedan dar a sus hijos, ya que, después de un viaje tan largo, no podrían llegar a su destino:
"Me pone triste saber que no podemos intentar cruzar, ahora con la aplicación [CBP One] esperamos entrar de buena manera, pero es muy lento el proceso y poco claro. A mis hijos trato de no decirles nada, pero sí se dan cuenta y me ven muy triste. Ellos se ponen tristes de saber que llevamos mucho tiempo acá. Es injusto que ahora nos hagan ver como delincuentes, nosotros sólo buscamos protección para nuestros hijos", compartió Susana, una madre venezolana de 29 años.
Ante esta situación, Save the Children en México hizo un llamado al gobierno de México para fortalecer todos los programas y políticas que brinden atención y, sobre todo, protección a la niñez y adolescencia. Subrayando que el gobierno mexicano "tiene una responsabilidad importante para seguir garantizando los derechos humanos de niñas, niños y familias migrantes, refugiadas y solicitantes de asilo que llegan, transitan y permanecen en nuestro país".
En este sentido, urgieron que es necesario "reforzar las capacidades operativas" de distintas dependencias que se dedican a salvaguardar los derechos humanos, así como atender las políticas para proteger a las familias migrantes con espacios físicos y seguros.
"Es urgente reforzar las capacidades operativas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, fortalecer más que nunca la coordinación y operación del Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, así como las Procuradurías de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, así como crear espacios físicos y entornos seguros y protectores para quienes requieran asistencia social y legal, atención psicosocial y acceso a servicios de salud", enfatizó Menéndez Carbajal.
ROA