Con el fin de recordar y honrar la lucha feminista que continúa, de reconocer los derechos de la mujer, lo logrado hasta la fecha, y señalar que aún falta mucho camino por recorrer, por segundo año consecutivo las trabajadoras del municipio de Monterrey organizaron una concentración en la Plaza Zaragoza para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
El evento estuvo encabezado por Katia Salazar Reyes, directora de Planeación y Evaluación del Desempeño; en el lugar las funcionarias escucharon las historias de cuatro de sus compañeras que laboran en la administración municipal.
Para Salazar Reyes, el encuentro demuestra cómo la administración de Monterrey visibiliza la lucha y el trabajo femenino.
“Es un espacio que queremos crear, es justo para normalizar y hacer visible este día, ya que no es un festejo, este día es para conmemorar el Día Internacional de la Mujer”, sentenció.
En su mensaje, Frida Rivera, fefa de Proyectos de la Dirección de Planeación, enumeró los logros en el último año a favor de las servidoras públicas.
"Las mujeres representan el 40 por ciento de la nómina municipal. Forman parte del primer gabinete paritario en la historia de la ciudad.
"Se han establecido políticas públicas con perspectiva de género. Está en proceso de creación el Primer Protocolo para prevenir, atender y sancionar la violencia laboral y la discriminación.
"Quedó formalizada la Política de Igualdad Laboral. Ya se lleva a cabo el plan de capacitación en materia de violencia laboral y perspectiva de género. Se cumplieron todas las recomendaciones para el reclutamiento, selección, ascenso y permanencia de la mujer al interior de la administración, y el establecimiento del uso cotidiano de lenguaje incluyente, entre otras acciones", señaló.
En el evento, Bertha Guizar Belmares, auxiliar administrativo en el departamento de accidentes en Tránsito, habló de la experiencia de laborar en el municipio y agradeció la oportunidad.
Ingresó hace 12 años cuando se le abrió la puerta para tener un trabajo con qué sostener a su familia, luego que su marido desapareció presuntamente a manos de la delincuencia organizada.
Ana Delia Pérez de León, del área de intendencia, es una buscadora, su hijo mayor desapareció desde 2010.
“Mi mensaje para este ocho de marzo sería que todas las mujeres seamos escuchadas, que no seamos violentadas”, pidió.