El coordinador de Medio ambiente, sustentabilidad y cambio climático del Partido Acción Nacional (PAN), Gabriel Quadri de la Torre, protestó la mañana del lunes en la refinería Miguel Hidalgo, situada en la región de Tula, para exponer que es una instalación que daña al medio ambiente y genera millonarias pérdidas económicas diarias.
Acompañado por la regidora tulense Araceli Rivera Díaz y por Sonia Jasso, presidenta del comité municipal del PAN, el ex candidato presidencial, exigió que el gobierno de México, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, atienda las problemáticas que genera dicho complejo petrolero.
Dijo que esta refinería es una de las principales fuentes de contaminación, no sólo en Tula, sino en todo el Valle de México, pues el petróleo tiene alto contenido de azufre y por ende es una de las fuentes de emisión más importantes en materia de bióxido de azufre al emitir más de 50 mil toneladas anuales de este producto.
Pero también es una gran emisora de partículas inhalables PM2.5, pues anualmente arroja más de 5 mil toneladas de estas, y añadió que es una refinería que carece de planes ambientales y de infraestructura ambiental adecuada para aminorar el daño a la población.
Por ello estas emisiones provocan muchas enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares, cáncer en los pulmones, demencia y síntomas similares al Alzheimer, al tiempo que dijo que la exposición a los contaminantes agudiza la mortandad por covid-19 y otras enfermedades respiratorias-infecciosas.
Exigió al gobierno de México que resuelva la problemática de la refinería y para ello pidió una auditoría ambiental pública con participación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y otras unidades, “para conocer a ciencia cierta la información que Pemex oculta, pues ha dejado de publicar información sobre sus emisiones desde 2019”.
También pidió suspensión de actividades de la refinería mientras no haya un inventario de emisiones, así como un programa de rehabilitación y mantenimiento necesario para la disminución de emisiones de bióxido de azufre y partículas PM2-5.
Añadió que la refinería Miguel Hidalgo pierde 32 dólares por cada barril de petróleo producido, es decir, más de 6 millones de dólares diarios, en moneda nacional se traducen en 120 millones de pesos diarios o en 43 mil millones de pesos al año.
Quadri subrayó que los mexicanos están pagando actualmente “la ineficiencia y la contaminación” que representa el funcionamiento de este complejo, y por ello urgió acciones inmediatas.
Anunció que tentativamente la próxima se interponga una denuncia penal por los hechos, a fin de que se sanciones las acciones u omisiones por los daños económicos y ambientales que se le producen al país con la operación de dicha refinería.
Y dijo que si no es rentable económicamente el funcionamiento de la refinería Miguel Hidalgo o no se reducen las emisiones contaminantes para evitar mortandad de la población, que el gobierno mexicano la liquide, la cierre y eventualmente la venda al sector privado para que sea operada de manera limpia y eficiente.