Los fiscales del caso que se lleva en Estados Unidos contra el ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, por cargos de narcotráfico pidieron al juez retrasar la divulgación de pruebas en su contra para proteger la seguridad de los posibles testigos involucrados y sus familias.
“El gobierno presenta respetuosamente esta solicitud de una orden que permita la divulgación diferida de materiales que podrían identificar a los testigos potenciales del juicio y/o interferir con las investigaciones en curso”, señala un oficio enviado este martes.
De acuerdo con el fiscal, Seth Ducharme, dichas pruebas contra el encargado de la seguridad en el sexenio de Felipe Calderón, incluyen cierta información que podría utilizarse para identificar a posibles testigos del juicio, lo que puede “aumentar el riesgo de intimidación” en su contra y de obstrucción de la justicia al disuadirlos de testificar en la corte.
Las pruebas, guardadas cautelosamente hasta ahora por el Departamento de Justicia estadunidense, revelarían la identidad de estos testigos “cuyas identidades aún no se han revelado al acusado, su abogado o al público”. La FGR ya ha solicitado la extradición del ex funcionario.
La fiscalía de Brooklyn teme que de revelarse su identidad de manera implícita por las pruebas que se tienen, estos testigos, junto con sus familias, “se enfrentarían a graves riesgos para su seguridad”, luego de que, el acusado se pondría al tanto de “su cooperación con el gobierno y su condición de posibles testigos del juicio”.
Sostiene que, de aprobarse el aplazamiento en la divulgación de estas pruebas por tres meses, “no habrá perjuicio para el demandado”. Pues son apenas unos pocos cientos de documentos y menos de una docena de archivos audiovisuales. “Dado el tamaño limitado (…) tendrá tiempo suficiente para revisarlas antes del juicio”.
Sin embargo, en el escrito hay una pequeña incoherencia pues se señala de manera literal “el gobierno busca aplazar la producción de una porción de los materiales durante aproximadamente tres meses, hasta el 1 de marzo de 2020”. En el momento que se redactó esta nota, las autoridades estadunidenses no han aclarado el error de tiempo.
Hasta la fecha el Departamento de Justicia le ha compartido a García Luna casi un millón de hojas de pruebas en su contra, entre las que hay fotografías y miles de conversaciones grabadas. Aún así prevé que continuará “realizando producciones menores sobre una base continua, ya que sigue recibiendo material”.
La petición dirigida al juez Brian Cogan se da unos días antes de la nueva audiencia en contra de García Luna programada para el próximo lunes donde se espera que, de una vez, se decida si se declara culpable de formar parte del cártel de Sinaloa o se entabla un juicio en su contra.
dmr