Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), se reunió con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, y con la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Liz Sherwood-Randall, con quienes trató el tema de intercambio de información para combatir a la delincuencia y frenar el tráfico de fentanilo.
El encuentro ocurre horas después de que las autoridades del gobierno de Tamaulipas localizaron a cuatro estadunidenses secuestrados en Matamoros, dos de los cuales los encontraron sin vida, y a días de que el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, opinó que el gobierno mexicano podría hacer “mucho más” para combatir el tráfico de fentanilo.
Autoridades de la dependencia federal indicaron que la reunión se llevó a cabo esta mañana en las oficinas centrales de la FGR en la Ciudad de México, donde los funcionarios de ambas naciones refrendaron su compromiso de continuar cooperando en los temas de seguridad que involucran a los dos países.
Por su parte, el embajador Ken Salazar escribió en Twitter que el encuentro tuvo como objetivo “mejorar la cooperación en seguridad y luchar contra el flagelo del fentanilo para proteger mejor a nuestras dos naciones”.
Ayer, Américo Villarreal, gobernador de Tamaulipas, y el fiscal de Justicia de dicha entidad, Irving Barrios Mojica, informaron que los cuatro estadunidenses secuestrados por un grupo criminal en Matamoros el 3 de marzo, fueron encontrados en una casa de madera en una zona conocida como La Lagunona, en el Ejido Los Tecolotes, camino a Playa Bagdad.
Dos de las víctimas murieron y los sobrevivientes fueron conducidos a uno de los puentes internacionales para entregarlos a las autoridades de Estados Unidos.
Además, la reunión del titular de la FGR con los funcionarios estadunidenses, se da a unos días de que el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, opinó que el gobierno mexicano podría hacer “mucho más” para combatir el tráfico de fentanilo, un opioide sintético 50 veces más potente que la morfina que ha causado miles de muertes en ese país.
Garland culpó frente al Senado a los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG) de la “horrible epidemia” de fentanilo que sufre Estados Unidos.
“Nos están ayudando, pero podrían hacer mucho más. No tengo ninguna duda sobre esto”, declaró el titular del Departamento de Justicia.
“Los narcotraficantes que fabrican estas pastillas y las distribuyen a Estados Unidos son las personas más horribles que uno se puede imaginar”, declaró.
Más de 100 mil estadunidenses murieron el año pasado por esta droga que se fabrica en México a partir de precursores importados desde China.
Este escenario fue utilizado por el legislador republicano estadunidense Dan Crenshaw para impulsar su polémica iniciativa para declarar la guerra contra los cárteles de la droga, así como su propuesta de ley para autorizar el uso de las fuerzas armadas en dicha guerra contra las organizaciones criminales.