Las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) así como de Economía (SE) buscan aprovechar la confianza en el sistema zoosanitario mexicano de los mercados asiáticos mediante el incremento de exportaciones de cárnicos a Japón, por parte de los ganaderos y empresas procesadoras mexicanas.
Por ello, convocaron a los titulares de Desarrollo Económico de los gobiernos del Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Yucatán, Puebla, Sinaloa, Sonora y Veracruz, así como a representantes de la industria porcina sobre las ventajas que adquieren los productores que incursionan en el mercado japonés y a su vez, la puerta de entrada a Brunei, Australia, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam.
“La exportación de carne de cerdo al país asiático representa la mayor historia de éxito de los ganaderos porcinos mexicanos, ya que anualmente se envían más de cien mil toneladas (…) México ha mantenido presencia y tendencia creciente en ese mercado, gracias a la confianza que existe en el sistema zoosanitario mexicano, así como por la calidad e inocuidad de los cárnicos que se producen en el país.”, señaló el representante de Agricultura en Japón, José Alberto Cuellar.
De acuerdo con la Sader, desde 1999 la exportación de productos a Japón ha redituado en divisas para México más de 29 mil 545 millones de dólares. Se estima que el año pasado el país envió más de 112 mil toneladas de cárnicos, por un valor económico de alrededor de 516 millones de dólares, gracias a que “México es libre de las principales enfermedades de importancia para el comercio de carne de cerdo”.
“Estamos posicionados, tenemos la calidad y la confianza, y están las condiciones sanitarias para incrementar nuestra participación en este mercado”, enfatizó la directora general de Facilitación Comercial y de Comercio Exterior, Dora Rodríguez Romero.
“México y Japón, cuentan con un sistema de inspección equivalente, lo cual permite que Senasica evalúe y enliste los establecimientos Tipo Inspección Federal que cumplen con las exigencias del mercado japonés, como los límites máximos de residuos de productos veterinarios, esterilización de utensilios a 83 grados centígrados y áreas de empaque separadas físicamente de zonas de proceso”, precisó el director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Francisco Javier Trujillo Arriaga.
JLMR