El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, reveló la estrategia que ha seguido durante toda la pandemia para evitar contagiarse de coronavirus, ya que al ser una persona con comorbilidades, la procuración de su salud se ha maximizado.
En conferencia de prensa, el mandatario compartió que más allá de usar cubrebocas y mantener la sana distancia en todo momento, echó mano de un ionizador de aire que le genera aire limpio en un perímetro de un metro; a eso se suma una máquina de ozono que se instaló en su oficina gubernamental, en Casa Aguayo, donde se desinfectan objetos y paredes todos los días.
"Tengo esta cosita que se llama ionizador de aire, ya le agarré fe, no sé si sirva o no, dice que te genera aire limpio en un área de un metro alrededor, en mi oficina hay una máquina de ozono, pasamos todo el tiempo a desinfectar, mi oficina la sanitizan todos los días".
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Sin precisar la fecha, señaló que estuvo "todo escamado" porque llegó a tener contacto con personas que enfermaron de covid-19, sin embargo, la prueba que se realizó resultó negativa, lo cual atribuyó gracias a los cuidados que Dios y su esposa, María del Rosario Orozco Caballero, le han brindado.
"Dios me ha cuidado, ha habido muchas gentes cercanas a mí que han salido positivas y cuando yo estuve todo escamado para saber si estaba yo contagiado, resultó que no lo estaba, primero Dios y después mi mujer me han cuidado mucho".
Se vacunará esta semana
Luego de que el titular de la Secretaría de Salud (Ssa), José Antonio Martínez García, anunciara que a partir del 1 de abril se dará continuidad a la inmunización de todas las personas de la tercera edad de Puebla capital, el gobernador de 61 años de edad solicitó al funcionarios que le guarde "una vacunita".
"Por ahí le pido al doctor (Martínez García) que me guarde una vacunita, no sea que las vaya a utilizar entre sus amistades que seguro son muchas, le encargo que le guarde a su gobernador una vacunita".
mpl