En los Centros Sociales de la entidad se encuentran al menos mil 500 niños de 10 a 18 años de edad, en espera de ser adoptados.
Los menores no reúnen el requisito “de edad” para las parejas con deseos de tener familia, indicó la procuradora de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, Cristel Yunuen Pozas Serrano.
En entrevista, luego de acudir al Foro Protección a la Maternidad y a la Niñez Mexiquense, señaló que están muy conscientes que todos quieren un niño de cero a dos años, por lo cual, cuando un bebe está en ese rango tiene el 100 por ciento de posibilidades de tener una familia, pero al llegar a los 10 años las pierden.
Para cambiar esto, consideró, es necesario sensibilizar a los adoptantes, generar una cultura distinta, para que todos tengan oportunidad de llegar a una familia y cambiar su historia, de maltrato o de un contexto grave que vivieron en sus primeros años de vida.
Durante su participación la procuradora indicó que legalmente existe una opción para que las mujeres no aborten y es la entrega institucional, para que el DIF se encargue de colocarlo en alguna familia donde su historia sea totalmente distinta.
Lo preocupante es que siguen las entregas entre particulares, debajo del agua, sin los perfiles necesarios.
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Tan sólo en estos dos años han ubicado al menos 15 casos que al final han terminado regularizando, reconociendo los lazos afectivos y el interés superior de los menores.
“Se sigue dando adopciones entre particulares, hemos hecho el trabajo. No se les quita el niño, porque el interés del menor respeta la cercanía afectiva. Tenemos que diferenciar entre la trata de personas y las entregas voluntarias”.
LC