A partir de los próximos días, el acoso en la vía pública, ya sea de forma física y/o verbal, será sancionado con hasta 36 horas de arresto y una multa económica por hasta 8 mil pesos contra quien lo cometa. Con esta medida, la capital se convierte en el primer municipio del estado en contemplar esta medida.
La reforma fue aprobada por unanimidad en una sesión de Cabildo, donde se celebró la decisión tomada por la administración municipal y se aplaudió a una regidora que tuvo el valor de narrar públicamente haber sido víctima de violación cuando tenía 21 años.
Sin embargo, en el Cabildo el cambio al Código Reglamentario Municipal (Coremun) no se consideró como un logro, pues “es apenas un paso que estamos dando”, indicó el presidente municipal, Luis Banck Serrato, quien resaltó la necesidad de cambiar “la forma de pensar heredada generación tras generación” respecto a la normalización de la violencia, en sus múltiples variantes contra la mujer.
La medida busca defender a cualquier persona que sea víctima de acoso sexual, sin embargo, la reforma se diseñó, principalmente, como una medida de protección a la mujer. Lo anterior, pues de acuerdo con estudios realizados por el ayuntamiento en colaboración con ONU-Mujeres, a nivel nacional, 47 por ciento de las mujeres consideran haber sido víctimas de acoso en algún momento de su vida; además, una de cada dos mujeres ha sido acosada en el transporte público, no obstante, 7 de cada 10 mujeres no consideran el acoso como una agresión.
En la sesión, la regidora, Ángeles Ronquillo, manifestó: “Quiero contarles que cuando tenía 21 años fui violada”. La funcionaria expuso que en esta experiencia no resultó embarazada, sin embargo, se habría tenido que enfrentar a que otra persona tomara la decisión de lo que debía ocurrir con su embarazo.
Asimismo, expresó que la sociedad aún considera esto como revictimización, es decir, se justifica la agresión al señalar que la mujer se pone en situación de riesgo y, por tanto, es responsable de los ataques que sufre en espacios públicos; no obstante, comentó que este es un tipo de riesgo al que, tradicionalmente, los hombres no se enfrentan.
Tras su intervención, la regidora recibió un aplauso por sus compañeros, quienes le manifestaron su respeto y solidaridad.
Respecto a los mecanismos de denuncia, se explicó que la víctima puede llamar a los números de emergencia y solicitar ayuda a la policía. El acusado deberá ser trasladado al Juzgado Calificador, quien fijará el monto de la multa y el tiempo de arresto.
En caso de que el responsable huya, la víctima puede acudir al Juzgado Calificador acompañada de un testigo y, si es posible, con la fotografía digital del o la responsable para levantar la queja correspondiente.
En su intervención, el presidente municipal, Luis Banck Serrato, comentó: “Con la decisión que ponemos a su consideración, la ciudad está dando un paso al frente y coincido, no es un logro, se está dando un paso al frente para confirmar nuestra convicción de que las mujeres tienen derechos para vivir libres de acoso y de violencia”.
ARP