A tres semanas de iniciar el próximo periodo ordinario en el Senado ya se avizora una nueva fractura entre la bancada de Morena por la designación del próximo presidente de la Mesa Directiva, la cual es disputada por el monrealista Alejandro Armenta y el radical José Narro Cespedes.
Al no tener el apoyo de la oposición, el llamado bloque de contención podría proponer que Eduardo Ramírez repita en el encargo al considerar que su gestión fue institucional.
Legisladores monrealistas adelantaron a MILENIO que no permitirán que desde Palacio Nacional se quiera imponer al próximo presidente del Senado, quien podría ser del ala radical, como Narro, Gabriel García o incluso el suplente de Martí Batres, César Cravioto, quien también fue funcionario en el gobierno capitalino con Claudia Sheinbaum.
Advirtieron que en caso de haber “dedazo”, entre 15 y 18 morenistas se separarían de la bancada de la mayoría y esto provocaría la destitución inmediata de Monreal como coordinador de la bancada.
Sin embargo, legisladores de los rebeldes señalaron que la destitución de Monreal no se tiene contemplado en este momento.
Fractura en Morena, oportunidad para oposición
En caso de presentarse la fractura, de manera inédita en lo que va de la legislatura, la oposición podría presentar una propuesta para presidir la Mesa Directiva por un año.
Hace unas semanas, el coordinador del PAN en el Senado, Julen Rementería, pidió a Morena presentar una nueva propuesta, porque no esta de acuerdo en que Armenta o Narro presidan la Mesa Directiva.
Si dejaran la bancada alrededor de 18 morenistas, más los senadores del PRI, PAN, PRD, Movimiento Ciudadano y Grupo Plural sumarían 71 legisladores; mientras que Morena, PT y PES serían 52 y el Verde, con cinco senadores, tendría que definir con quién votaría, pues en caso de que Ramírez sea la propuesta, podría tener su apoyo, pues fue funcionario en Chiapas cuando Manuel Velasco ocupó la gubernatura en el estado.
La disputa por esta presidencia se daría en el marco de temas nacionales como la elección en el Estado de México y la definición del candidato de Morena a la Presidencia de la República en 2024.
El senador de Movimiento Ciudadano, Noé Castañón, se dijo respetuoso del proceso interno del grupo mayoritario; “sin embargo, es una posición que efectivamente se elige por mayoría de votos de los legisladores, no es una cuota de partido.
"Entonces, cómo siempre lo hemos hecho, creemos que debe ser quien encabece la Mesa Directiva la persona que mayor consenso tenga entre todas las fuerzas políticas y no sólo al interior de una sola postulando, incluso, a senadores de otras fuerzas políticas”.“No decantaría en ninguno de los dos, sino que esperaríamos a tener nuestra reunión plenaria para poder definir qué perfil va a representar al Senado, siempre buscando a alguien con la institucionalidad y con capacidad de representación plural”, agregó.
-—¿Apoyaría al senador Julen para que Morena presente una tercera opción?— se le preguntó.
"Sin duda, una tercera opción podría ser la solución cuando hay discrepancia entre dos posiciones".
En tanto, el senador del PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, consideró que Morena siempre tendrá a su favor la fuerza de los números, pero “entiendo que hay una serie de acuerdos para que la oposición participara más este año que empieza en septiembre, pero no sé que tanto pueda ser realidad.
"Yo veo el tema enrarecido en todos lados y espero que podamos llegar a la hora de formar la Mesa Directiva con un criterio mucho más enfocado al consenso y beneficio del Senado, pero ahorita, no hay conversaciones entre el PAN, PRI y Morena y veo en Morena una agitación propiciada por los mismos candidatos”.
En agosto de 2021, Ramírez dejó la presidencia de la Mesa Directiva y en esa ocasión la oposición agradeció el trabajo institucional y respeto que tuvo hacia todos los grupos parlamentarios.
JLMR