Indignante, caso de Mariana Dávalos: Ssa; cero tolerancia a violencia de género, asegura

La Secretaría de Salud reforzará los vínculos con diversas dependencias para dotar de herramientas necesarias para prevenir, denunciar y/o atender casos de hostigamiento y acoso sexual o cualquier otra manifestación de violencia de género.

Mariana había solicitado a la Universidad Autónoma de Chiapas un cambio de comunidad para realizar su servicio. (Especial)
Karla Guerrero
Ciudad de México /

El caso de Mariana Sánchez Dávalos, la medica quien realizaba su servicio social en la clínica de la colonia Nueva Palestina, municipio de Ocosingo, Chiapas, es indignante y se tendrá cero tolerancia hacia las conductas y manifestaciones de violencia de género y contra las mujeres, aseguró Jorge Alcocer, secretario de Salud. 

“El combate a la violencia, la desigualdad y la discriminación requiere un compromiso permanente de toda la sociedad con la eliminación de todas las conductas que transgreden la integridad y la dignidad de las personas y atentan contra sus derechos humanos”, aseguró Alcocer.

El 29 de enero se dio a conocer que Mariana de Lourdes, una joven estudiante de la Universidad Autónoma de Chiapas se suicidó, presuntamente, ante la falta de respuesta de una denuncia que realizó tras ser víctima de abuso sexual en Ocosingo, comunidad donde realizaba su servicio social. 

La joven de 24 años presentó su denuncia ante la Fiscalía General del Estado y después recurrió a la Secretaria de Salud en busca de apoyo, pero no lo encontró. Además había solicitado a su universidad un cambio de lugar para realizar su servicio, pero dicha petición tampoco obtuvo respuesta. 

En un comunicado, la Secretaría de Salud reafirmó su compromiso con la erradicación de conductas como el hostigamiento y el acoso sexual, por lo que se requiere de un compromiso permanente para resguardar la integridad y dignidad del personal de Salud.

Resaltó que el hostigamiento y acoso sexual son conductas inaceptables, por lo que los servidores públicos deben de garantizar la ética laboral en los centros de trabajo.

“Las y los servidores públicos deben cumplir los compromisos de la ética fundada en el respeto, la igualdad, la protección de la integridad y los derechos humanos de todas las personas. El hostigamiento sexual y el acoso sexual son conductas inaceptables que lastiman gravemente la dignidad de las personas, y son las niñas, adolescentes y mujeres las más afectadas”.

Alcocer indicó que desde la Secretaría de Salud federal se reforzarán los vínculos que sean necesarios entre el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGSR) y sus componentes de equidad de género y violencia de género, con la Dirección General de Calidad y Educación en Salud y con los servicios de salud estatales, para asegurar que los estudiantes de Medicina y los servidores públicos a cargo de los programas de educación, cuenten con las herramientas necesarias para prevenir, denunciar y/o atender los casos de hostigamiento y acoso sexual o cualquier otra manifestación de violencia de género, aplicando los protocolos ya establecidos para trabajar en la atención y erradicación de estas conductas.

JLMR

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