La candidatura de José Antonio Kast, el ultraderechista que quedó a la cabeza en la primera vuelta de las elecciones de Chile, el 21 de noviembre, y que puede ganar la presidencia de su país en la segunda ronda de mañana, es expresión de una campaña internacional impulsada por la estadunidense Alliance Defending Freedom (Alianza Defendiendo la Libertad, ADF), agrupaciones iberoamericanas ligadas a la organización clandestina El Yunque y el partido español Vox.
Enarbolando las banderas de la libertad y la familia, se proponen colocar gobiernos, congresos y jueces que reviertan derechos de las mujeres y de las minorías sexuales, combatan al “comunismo” e impongan políticas represivas para controlar la criminalidad y las protestas políticas.
Una expresión de sus propósitos se encuentra en lo que llaman “Declaración de México”, presentada en un “Congreso Hemisférico de Parlamentarios” el 15 de junio de 2017 en Ciudad de México. El evento fue patrocinado por ADF y presidido por Kast, en anticipación de la 47ªAsamblea General de la Organización de Estados Americanos (que inició en Cancún cuatro días después), a la que acusaron de “imponer un imperialismo cultural sobre nuestras naciones”.
El anfitrión fue el entonces diputado panista Javier Bolaños, identificado con El Yunque y, en 2008, coordinador de la campaña para gobernador de Morelos del yunquista Marco Antonio Adame.
También participaron siete legisladores, en ese momento todos panistas: María de la Paz Quiñones, Guadalupe González Suástegui, Daniel Ávila Ruiz, Rosa Adriana Díaz, Víctor Hermosillo y Celada, José María Martínez y Sonia Mendoza) y uno del Partido Encuentro Social (Israel Fierro).
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Vox en América Latina
Hijo de Michael Kast, un militante del Partido Nazi que combatió en la Segunda Guerra Mundial, el candidato ultraderechista fue dirigente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), que con Renovación Nacional (RN) es heredera del bloque político del dictador Augusto Pinochet.
Kast se separó porque esos partidos son una “derecha light” y en su primer intento de llegar a la presidencia, en 2017, obtuvo 7 por ciento de los votos.
Entre los más activos miembros de su equipo de campaña se encuentran los rostros conocidos de El Yunque en Chile: el coordinador de su programa económico, Eduardo Guerrero Núñez; Henry Boys, Rodrigo Donoso y Benjamín Lagos, treintañeros socios en la Editorial Conservadora, que publica libros en defensa de la dictadura de Pinochet, y en el Observatorio de la Cultura Juan Pablo II; Juan Carlos Aguilera, quien coordinó su primera campaña presidencial; y la diputada de UDI Nora Cuevas, ex vocera de Kast.
El Yunque español, que como el mexicano opera en la clandestinidad, actúa públicamente con el nombre HazteOir. Para su expansión internacional, utilizan la marca CitizenGo. Ambas tienen sucursales en México. Boys, Donoso y Lagos promueven HazteOir en Chile.
De acuerdo con el español Santiago Mata, HazteOir impulsó a Santiago Abascal para dividir el Partido Popular y formar una nueva organización electoral, Vox, en la que tiene gran influencia. Es lo mismo que hizo Kast: con apoyo de sus amigos yunquistas, dividió UDI y RN para fundar su Partido Republicano.
En 2019, para felicitarlo por los avances electorales de Vox, José Antonio Kast le envió un tuit a Abascal que decía: la “derecha chilena tiene mucho que aprender de la derecha española”.
Abascal ha estado viajando por América Latina promoviendo su proyecto “Iberosfera”, con el que pretende crear filiales de Vox. El 24 de junio de 2021, Kast se reunió en Madrid con él para discutir “la necesidad de frenar la hegemonía de la izquierda en la cultura, la educación o el Estado de derecho”.
En octubre pasado, Abascal vino a México y tuvo una polémica reunión con senadores del PAN. Algunos panistas mexicanos, como la ex diputada Elsa Méndez, aseguran que están avanzando ya en la conformación de un “Vox mexicano”.
Otro aliado de Kast es el escritor Mario Vargas Llosa, quien el 3 de diciembre le dijo en una conversación por YouTube que su hipotética victoria era “absolutamente fundamental”.
Esta relación conecta al chileno con otra campaña de la ultraderecha estadunidense, la de Atlas Network, una plataforma que financia proyectos políticos en América Latina, como la Bienal de Literatura Vargas Llosa, que tuvo lugar en la Universidad de Guadalajara, Jalisco, en septiembre, y el Premio de Periodismo Vargas Llosa-Atlas Network.