“Nunca se había tenido un diálogo tan profundo”: Ken Salazar sobre reunión México-EU

El embajador de Estados Unidos en México alertó que el fentanilo es un problema mundial.

Salazar calificó como 'histórica' la cooperación entre los dos países.
Ángel Hernández
Ciudad de México /

El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar presumió que, en el marco del último Diálogo de Alto Nivel de Seguridad, la cooperación entre ambos países es histórica, aunque enfrenta retos igualmente complejos: “nunca se había tenido un diálogo tan profundo.”

En conferencia de prensa desde su residencia, un día después del encuentro, aseguró que “con el diálogo se va a levantar el entendimiento y vamos viendo cuáles son las mejores ideas para la unión de América del Norte”, y así enfrentar los cuatro retos que, según Salazar, hay en la relación bilateral: la migración irregular, el tráfico de armas, el tráfico de fentanilo y el fortalecimiento de las relaciones.

“En ese marco de realidad tenemos que trabajar aún más juntos EU y México para solucionar los problemas, los restos que tenemos”, aseguró el diplomático estadunidense.

Sobre las diferentes posturas que hay respecto del tráfico de fentanilo, en donde autoridades estadunidenses aseguran que la droga es producida en México con precursores traídos de Asia, mientras que funcionarios mexicanos lo niegan, Salazar apuntó que “lo importante son las acciones y serán los resultados, se produce fentanilo aquí en México.”

Además, explicó que se trata de un problema a nivel mundial, por lo que será necesario que haya un esfuerzo global, comenzando por la colaboración con México: “nosotros trabajando muy de la mano con el gobierno mexicano para resolver este problema que nos afecta a las dos naciones.”

Salazar se dijo optimista con respecto a la colaboración entre ambos países, y puso como ejemplo la extradición de Ovidio Guzmán López, uno de los líderes de Los Chapitos, a Estados Unidos a mediados de septiembre: Por ejemplo, “eso pasó por la cooperación que tenemos.”

Finalmente apuntó que uno de los problemas a tratar entre ambos países es la corrupción en las aduanas, lo que ha permitido el paso de diversos productos ilícitos, como precursores químicos y armas: “por eso trabajamos muy de la mano con la marina sobre lo que está pasando en los puertos.”

SCZ

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