La Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe) señaló que aunque la reducción de la movilidad ha bajado en 60 por ciento debido al Quédate en casa implementado por la pandemia de covid-19, las altas concentraciones de contaminantes continúan debido a condiciones meteorológicas y a la generación de Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) que producimos en el hogar y que generan ozono.
"Para mejorar la calidad del aire y prevenir los picos de ozono es indispensable reducir la actividad vehicular pero no es suficiente, pues cuando la meteorología fomenta la formación de ozono y limita su dispersión, aún con menores emisiones se pueden alcanzar niveles de muy elevados de ozono”, explicaron expertos y miembros del Comité Científico Asesor de la CAMe.
En un comunicado la comisión destacó que la emergencia sanitaria para reducir la propagación del coronavirus ha contribuido a reducir las emisiones a la atmósfera, debido a la reducción del tráfico vehicular estimada en 60 por ciento, comparada con el promedio para 2019.
“Esto ha contribuido a reducir en un 28% el monóxido de carbono y otras emisiones asociadas al transporte, impidiendo que se alcancen los valores de contingencia. El pronóstico indicaba que durante esta temporada de ozono en la ZMVM se esperaban hasta 7 contingencias ambientales, debido a las altas temperaturas y radiación solar”, explicó la CAMe.
Pero indicó que además es necesario controlar otras actividades y fuentes que continúan emitiendo precursores de ozono a la atmósfera, en especial Compuestos Orgánicos Volátiles, pues se estima que las fugas de gas LP son responsables del 19% y los usos comerciales y domésticos de solventes y productos de limpieza emiten hasta un 31% de los COV.
En el caso de las partículas finas PM2.5, durante esta temporada del año se incrementaron como resultado de quemas agropecuarias y de incendios forestales, que en el 98% de los casos son producidos por las personas, y cuya quema genera grandes cantidades de COV que contribuyen a la formación de ozono.
De tal forma, los expertos de la CAMe recomiendan a la población algunas acciones para la reducción de emisiones de compuestos orgánicos volátiles durante esta temporada:
• Evitar el uso de pinturas de aceite y disolventes.
• Evitar el uso de productos de cuidado personal en aerosol: desodorantes, fijadores.
• Revisar y en su caso reparar fugas de gas LP.
• Mantener apagado el piloto del boiler cuando no está en uso.
• Reducir el tiempo de baño a un máximo de cinco minutos y hacerlo por las tardes, para disminuir las emisiones por la quema de combustible.
• Evitar el consumo de tabaco en general, y especialmente en espacios cerrados.
• No realizar fogatas ni quemar ningún tipo de residuos.
• Evitar las quemas agropecuarias y prevenir incendios forestales.
• Cargar gasolina a los vehículos antes de las 10:00 horas o a partir de las 19:00 horas, para reducir la evaporación.
Para evitar se afecte la salud.
Recomienda además:
• Evitar hacer ejercicio en exteriores entre las 13:00 y 19:00 horas, cuando la calidad del aire no sea aceptable.
• En días con elevados niveles de ozono, procurar ventilar los hogares antes de las 13:00 y después de las 19:00 horas.
• Permanecer en sus hogares y no salir a menos que sea estrictamente necesario.
• Mantener el principio de la sana distancia entre personas (1.5 metros).
• Estar atentos a los reportes del Índice de Calidad del Aire y riesgos a la salud y sus recomendaciones.
¿Cómo se forma el ozono?
El ozono es uno de los principales contaminantes del aire en la Zona Metropolitana del Valle de México, se forma a partir de otros contaminantes que se arrojan a la atmósfera, conocidos como precursores: óxidos de nitrógeno (NOx) y una amplia variedad de sustancias conocidas como Compuestos Orgánicos Volátiles (COV).
La formación de ozono ocurre cuando hay una fuerte radiación solar y se acelera cuando se tienen elevadas temperaturas. El ozono así formado se acumula y estanca en la ciudad cuando hay condiciones de calma como baja velocidad del viento y ausencia de lluvia. Las mayores concentraciones se alcanzan típicamente entre las 13:00 y las 19:00 horas, señalaron expertos y miembros del Comité Científico Asesor de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAMe).
Además, indicaron que “cuando se dan simultáneamente estas condiciones meteorológicas adversas, basta que se tenga tan sólo una fracción menor de las emisiones contaminantes típicas para poder alcanzar muy altas concentraciones de ozono”.
Cada año entre marzo y junio, en la ZMVM se presentan justo las condiciones meteorológicas que favorecen la formación y acumulación de ozono; de hecho, durante marzo y abril de este año se ha tenido un período inusualmente caliente, alcanzando en seis ocasiones, temperaturas máximas que rebasan los valores históricos más altos para cada fecha.
En varios de estos días además se han presentado condiciones de fuerte estabilidad atmosférica, donde la velocidad del viento se mantiene por debajo de los 2 metros por segundo, favoreciendo el estancamiento de los contaminantes, afirmaron los especialistas.