Morena tiene en sus manos el siguiente destino de Marcelo Ebrard. Y un desacuerdo entre ambas partes llevaría al ex canciller a acudir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), al que López Obrador contempla en su “listita negra” por las “actitudes deshonestas” de sus jueces “falsarios y de consigna”.
“Ya los tengo anotados”, comentaba el pasado agosto seguido de un chascarrillo por las multas que el órgano suele emitir a sus infractores. Y a los que Andrés Manuel ya pertenecía luego de ser restringido a expresarse de las elecciones de 2024: “Ya es como la Santa Inquisición; el instituto de la censura”, reprochó en otra ocasión.
El tabasqueño ha sido un crítico del Tribunal Electoral. La restitución de Edmundo Jacobo en el INE, la prohibición de los peluches ‘amlitos’ o impedir mencionar a Xóchitl Gálvez fueron algunas de las flechas que reclamó contra la institución a la que Ebrard podría apelar.
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AMLO también tiene al TEPJF en la mira y ha subrayado su intención de someterlo a una eventual Reforma Judicial. Y aunque estas rencillas han destacado en la opinión pública, otros miembros de la 4T también se han sometido al criterio del Tribunal.
Uno de los casos más recientes fue la controversia de Citlalli Hernández contra Ricardo Salinas Pliego, en la que la Secretaria General de Morena acusó al magnate mexicano de “violencia política de género” en razón de cómo le hacía referencia en la red social X (antes Twitter).
El intercambio de tweets entre ambos derivó en una queja de la morenista ante el Instituto Nacional Electoral (INE). La Comisión de Quejas validó su argumento y emitió una medida cautelar contra el empresario por, según la acusación, “afectar el desempeño del cargo“ de Hernández, además de “discriminarla por su apariencia física”.
Inconforme por la “vulneración a su derecho de la libertad de expresión”, Salinas Pliego alegó la determinación: el Tribunal sesionó, le otorgó la razón y revocó el acuerdo de la Comisión de Quejas del INE. “Le tienen miedo”, reaccionó Citlalli y señaló al órgano por “retroceder en el combate a la violencia política de género”.
El historial de Layda Sansores por violencia política
En su afán por arremeter contra Alejandro Alito Moreno, la gobernadora de Campeche llegó a pisar el Registro Nacional de Personas Sancionadas por Violencia Política por Razones de Género del INE.
“Cuidado diputadas, porque algunas de ustedes mandaron fotos, de veras, unas hasta desnudas”, dijo Sansores San Román en un Martes del Jaguar tras reconocer que tenía acceso a fotografías íntimas de legisladoras del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y las cuales habrían enviado al dirigente nacional. La morenista se había condenado.
Más de 20 diputadas del tricolor denunciaron a Morena, su dirigencia en Campeche y a los titulares de Comunicación Social y del Sistema de Televisión y Radio del estado. La Sala Regional del Tribunal avaló que Layda Sansores había incurrido en violencia política de género e instruyó a incluirla en el padrón — junto a otras 25 personas más — en un periodo que podía corresponder de los seis meses hasta los cuatro años y medio.
Esa medida de no repetición debía acompañarse de una disculpa pública de la mandataria estatal en razón de “la violencia sexual, simbólica, verbal, mediática, digital y psicológica” cometida contra las priístas.
Mario Delgado y la 'defensa de la autonomía' de Morena
La medida cautelar del TEPJF López Obrador movilizó a las filas del guinda: gobernadoras y gobernadores cerraron filas contra el ex líder de la 4T y acusaron al Tribunal de manipular las palabras del presidente. “No tiene límite”, condenó Mario Delgado en el espaldarazo que también dio al Jefe del Ejecutivo el pasado julio.
Su inconformidad remitió al que externó en abril por el proyecto de la magistrada Janine Otálura que buscaba invalidar la ampliación de su cargo como dirigente nacional de Morena — y el de Citlalli Hernández en la Secretaría General — hasta el 2024.
“Viola la autonomía de nuestro partido de decidir”, reaccionó Delgado Carillo ante el argumento de Otálora por supuestamente “afectar los principios electorales y al sistema democrático”.
Sin embargo, el proyecto fracasó. La mayoría de la Sala Superior del TEPJF "respetó" la decisión del partido para extender el plazo en que Mario y Citlalli se mantendrían en sus cargos. "Les salió el tiro por la culata", reaccionó el dirigente.
"Este golpe que pretendían dar para debilitar a nuestro partido, terminó fortaleciéndonos y mostrando que estamos más unidos que nunca".