Marta Sahagún no puede negar que ayudó a los Legionarios de Cristo a empoderarse y cosechar más dinero bajo el cobijo de la presidencia de Vicente Fox, asegura la escritora argentina Olga Wornat.
“Sin que se le moviera un pelo, sin pudor, sin asco, así los empoderó. Política y religión es un dúo bastante peligroso”, afirma sobre la investigación que sigue la Unidad de Inteligencia Financiera sobre los recursos de Sahagún y de la organización religiosa que fundó Marcial Maciel.
La escritora y periodista conoce bien a Sahagún, a la que retrató en su libro La Jefa, que al inicio tuvo su anuencia y, al final, le costó una demanda de Sahagún de Fox. Después de años de acoso desde el gobierno federal, la periodista fue exonerada por un juez.
“Justicia no por venganza, por un asunto de reivindicación personal”, dice.
Si las indagatorias llegan a fondo, adelanta, “encontrarán muchas sorpresas”.
¿Fue difícil escribir un libro sobre la esposa de un presidente?
Muy difícil. Yo viví en México varios años, la entrevisté varias veces, hablé con su familia, ella consintió el libro. Sin embargo, no le gustó y cuando yo vivía con mi familia en la Condesa, llegaban a mi casa paquetes, llamaban y nadie contestaba, me demandaron, intervinieron los teléfonos de mis amigos. Un día me mandaron un féretro con flores y una carta en la que me decían que si no me iba, me iban a matar. Todas las investigaciones que se hacían quedaban en la nada porque obviamente estaba protegida desde la Presidencia. Tanto la señora como Vicente Fox y sus hijos e hijastros se enriquecieron en la función pública, se aprovecharon del poder y no tenías más que ir a Celaya para que te contaran cómo llegaron al poder y cómo se fueron. Todo eso lo pagó el pueblo mexicano.
En Crónicas malditas documentaste el enriquecimiento de los hermanos Bribiesca, los hijos de Marta Sahagún.
Yo supe de empresarios, cómo los extorsionaban, les pedían dinero. Muchos me contaban que estaban hartos de la señora, pero que ella mandaba a Manuel Bribiesca, su hijo mayor, a pedir dinero y como era desde la Presidencia, aunque era un mecanismo muy perverso y hasta delincuencial, lo aceptaban.
Mucho se dijo que hubo protección del gobierno de Vicente Fox a los Legionarios de Cristo. Hoy con la investigación de la UIF se confirma que esta organización religiosa estaba encumbrada...
Claro, los Legionarios tenían cercanía con la familia de Marta, pero también con la mamá de Vicente Fox. Los Legionarios son una congregación del poder. Pedían dinero a los ricos, por eso amasaron tanto. Hay un empresario en Monterrey, muy rico, que me contó hace cuatro años, muy decepcionado de Marcial, que le pagó 4 millones de dólares para tener una cita con el Papa, entonces Juan Pablo II, con quien Maciel tenía una relación muy cercana y hasta gozaba de protección.
Entonces había ya señalamientos contra los Legionarios
Claro y Marta los defendió, le pregunté y lo negó, dijo que no era cierto, ella me dijo que los ocho años que estuvo con ellos, nunca escuchó nada. Ella no puede decir que no tuvo vínculos, sí que los tuvo y sí que los ayudó a empoderarse y a cosechar más dinero. Sin pudor, sin asco, nada.
RLO