Frente a una delegación de congresistas demócratas de Estados Unidos, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, afirmó que ningún legislador está pensando en poner en riesgo el Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“En el Senado mexicano estamos de acuerdo con el tratado, ningún senador de ninguna fracción parlamentaria está pensando en poner en riesgo el T-MEC”, subrayó.
Acompañado por la presidenta de la Mesa Directiva, Olga Sánchez Cordero, así como el senador de Connecticut, Chris Murphy, el congresista por Illinois, Jesús García, y la congresista por Missouri, Cori Bush, el presidente de la Junta de Coordinación Política confío en que la buena relación entre México y Estados Unidos permitirá que se resuelvan las diferencias que se han presentado en las últimas semanas.
“Estoy convencido que la buena relación de nuestros gobiernos y el marco legal del tratado permitirá que estas diferencias se resuelvan de manera positiva para la región”, insistió.
En lo referente al comercio, dijo que se debe tener presente que el T-MEC cumplió dos años en operación el 1 de julio pasado “y los resultados son ya evidentes”.
Señaló que en estos momentos continúan los trabajos del panel solicitado por México y Canadá para resolver las diferencias con Estados Unidos en torno a la interpretación y aplicación de las reglas de origen para el sector automotriz bajo el T-MEC.
“La posición de México ha sido que, conforme al texto del tratado, la interpretación y aplicación deben permitir a los productores de vehículos de la región beneficiarse de los nuevos requisitos en materia de reglas de origen que prevé el acuerdo. Se espera que el panel emita su informe en el mes de noviembre, a menos que las partes decidan algo distinto. Estamos seguros que el resultado será positivo para los tres países”, comentó.
Monreal celebró la promulgación de la Ley de reducción de la inflación, recientemente aprobada por el Congreso estadounidense y firmada por el presidente Joe Biden; la cual contempla una serie de estímulos para la compra de vehículos eléctricos fabricados en América del Norte, como parte de las medidas para combatir al cambio climático.
“El hecho de que se contemple la fabricación regional en estos subsidios, no solo la estadounidense, es un logro importante para avanzar en la integración del sector automotriz”, agregó.
Además, comentó que el tratado también ha sido y seguirá siendo un instrumento para resolver controversias naturales entre socios comerciales.
Recordó que el 20 de julio, el gobierno de Estados Unidos solicitó el inicio de consultas al amparo del T-MEC, a fin de plantear una serie de preocupaciones sobre la política energética mexicana.política energética mexicana.
“Estados Unidos considera que existe un trato preferencial a las empresas estatales en el sector energético, lo que se traduce en un trato discriminatorio para el capital privado, a su juicio”, mencionó.
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Por ello, dijo, el 28 de agosto dieron inicio las consultas solicitadas, por lo que, los equipos técnicos tienen 75 días para llegar a un acuerdo, es decir, hasta el mes de octubre, de lo contrario, los gobiernos que plantean la consulta podrían establecer y solicitar el panel, lo que podría demorar la resolución del diferendo hasta mayo de 2023.
Por otra parte, la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, confió en que la reunión sea muy provechosa, “creo también en que, como ustedes saben, el T-MEC ha estado funcionando, ha estado funcionando muy bien; somos el segundo socio comercial de ustedes y por supuesto tenemos también muchos temas que platicar con ustedes”.
Posteriormente el encuentro se realizó a puerta cerrada para que los congresistas estadounidenses expresaran su postura sobre el tema.
EHR