Luego de que vecinos de la colonia Independencia protestaran por la interconexión Macroplaza-Valle Oriente, asegurando que las autoridades los han amedrentado para aceptar la reubicación, el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, dijo que no existe tal situación y pidió a los ciudadanos denunciar cualquier amenaza.
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Durante la inauguración del proyecto de rehabilitación de un parque en la zona de San Jerónimo, Adrián de la Garza mencionó que las autoridades no amedrentarán a ningún ciudadano y buscarán llegar a acuerdos con todos.
"Nosotros no vamos a caer en ningún tipo de amedrento, no sé quién de los vecinos haya dicho eso, ayer tuvimos una sesión del fideicomiso que lleva a cabo esto, que hay un grupo multidisciplinario del Estado, de San Pedro, de Monterrey, haciendo el acercamiento con la gente, vamos a estar trabajando conforme a derecho", dijo.
Por esta situación, el alcalde invitó a cualquier vecino que sea víctima de una situación de este tipo a que denuncie ante las autoridades o se acerque al ayuntamiento para revisar el caso.
"No vamos a permitir que se vaya a amedrentar a nadie, cualquier vecino que se sienta amedrentado que ponga la denuncia correspondiente, incluso que acuda ante el alcalde, que acuda con nosotros para poder tomar las determinaciones en ese sentido", indicó.
Con respecto a las quejas e inquietudes de los vecinos sobre que las construcciones se harían en zonas de riesgo, el alcalde de Monterrey dijo que el proyecto es realizado por áreas técnicas de los municipios de San Pedro y Monterrey, además del Estado, por lo que les pidió tranquilidad.
"Lo está haciendo toda un área técnica importante, si es una zona de riesgo obviamente no se van a dar los permisos correspondientes para que se haga... deben de estar tranquilos los vecinos y todos los ciudadanos de Monterrey, que no vamos a construir nada en zona de riesgo, que no vamos a hacer una conectividad a capricho", enfatizó.
La Junta de Vecinos en Resistencia por las Obras de Interconexión Independencia-Tanques América ha mostrado su rechazo hacia el proyecto desde que se anunció, señalando violaciones a derechos y leyes ambientales en la construcción del proyecto.