Ante estimaciones de una baja en las lluvias de hasta un 32 por ciento por debajo de lo normal en los próximos meses, podría ser señal que apunten al inicio de una incipiente sequía en Nuevo León, previó Doroteo Treviño Puente.
El residente general de Rehabilitación y Conservación de Conagua garantizó, sin embargo, el abastecimiento del líquido en el estado para el 2018, aunque si no llueve podría haber problemas para el próximo año.
"En este momento no hay indicio de que haya una sequía, sin embargo, esta estimación que nosotros hacemos de que la lluvia esté por debajo de lo normal de junio a septiembre, pudiera ser, ojalá no, el indicio de una incipiente sequía", dijo.
El lunes pasado, el gobernador Manuel González Flores señaló que no hay un problema grave de sequía, pese a que 11 municipios de Nuevo León fueron declarados por la Secretaría de Gobernación como de emergencia por el golpe de calor que azota al país.
Treviño Puente participó en la reunión del Comité Estatal de Seguridad en Salud, Prevención y Atención por la Temporada de Calor, presidida por Manuel de la O Cavazos, secretario de Salud estatal, realizada en el piso 17 de la Torre Administrativa.