La aplicación de nuevos aranceles a productos importados de países asiáticos sin tratado comercial con México tiene como objetivo proteger más de 325 mil empleos y reactivar la producción nacional en sectores estratégicos, afirmó el presidente de la Comisión de Economía del Senado, Emmanuel Reyes Carmona.
El legislador explicó que la reforma a la Ley de Impuestos Generales de Importación y Exportación (LIGIE), que entrará en vigor el 1 de enero de 2026, permitirá imponer aranceles de hasta 50 por ciento a más de mil 400 productos provenientes principalmente de China, Corea del Sur, India, Vietnam y Tailandia. La medida impactará ramas como la automotriz, autopartes, textil, confección, plásticos, calzado, acero y aluminio.
¿Cuál es el propósito?
Reyes Carmona señaló que la iniciativa busca no solo preservar los empleos existentes, sino también generar nuevas fuentes de trabajo en al menos 19 sectores industriales.
Añadió que los aranceles respetan los compromisos internacionales de México, al mantenerse dentro de los niveles máximos permitidos por la Organización Mundial del Comercio (OMC), conocidos como “aranceles consolidados”.
Asimismo, destacó que la reforma se alinea con los objetivos del Plan México, al fomentar la sustitución de importaciones, reducir la dependencia de proveeduría extranjera y fortalecer el contenido regional en áreas clave para la economía nacional.
No obstante, desde el Senado también se han expresado reservas sobre los posibles efectos de la medida. La senadora del Partido del Trabajo (PT), Yeidckol Polevnsky, advirtió que los aranceles podrían generar impactos negativos en la industria nacional y en los consumidores, particularmente cuando se trata de insumos que no se producen en el país.
En entrevista con MILENIO, la legisladora coincidió en la necesidad de fortalecer la producción nacional, pero subrayó que el proceso debe realizarse de manera gradual y coordinada con los sectores productivos.
Explicó que la instalación de nuevas plantas y la sustitución de insumos importados requieren tiempo, por lo que una aplicación acelerada de aranceles podría elevar los costos para las empresas y trasladarse a los precios finales, con efectos inflacionarios.
Las precauciones
Polevnsky Gurwitz señaló que empresarios consultados en el Congreso manifestaron disposición a sustituir importaciones siempre que existan alternativas viables en el mercado nacional.
En caso contrario, propuso incentivar la inversión extranjera directa mediante esquemas de asociación con empresas mexicanas, lo que permitiría fortalecer cadenas productivas bajo un modelo de beneficio mutuo.
La senadora también enfatizó que la economía global opera bajo esquemas de integración productiva y que existen oportunidades comerciales con China, al tratarse de un mercado amplio y abierto a la importación de productos mexicanos.
En este contexto, destacó que se realizarán mesas de trabajo para analizar de manera técnica y sectorial la implementación de los nuevos aranceles.
Finalmente, reiteró que el respaldo a la política arancelaria debe centrarse en productos que cuenten con producción nacional suficiente, y no en aquellos insumos que aún no pueden ser sustituidos en México.
HCG