La compra de los tres túneles para la verificación vehicular gratuita es un “buen comienzo como para abordar el tema de las emisiones, tanto de transporte público, como gubernamentales y particulares”, consideró Selene Martínez, directora del Observatorio Ciudadano de Calidad del Aire del Área Metropolitana de Monterrey.
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Por lo que mencionó que se tendrá que estar muy atentos a cómo se va a definir este programa.
“Vamos a estar vigilando si este programa va a ser o no efectivo, certero y sobre todo qué va a ganar el ciudadano cuando voluntariamente vaya a checar su auto, y qué va a pasar con los autos que no pasen esa prueba, que deben ser muchísimos los que estén en malas condiciones”.
Advirtió que un programa de esta característica es “peligroso por dejarlo a la voluntad un tema tan importante”.
Estos túneles, dijo, son para detectar autos y camiones del transporte público que sean altamente contaminantes.
“Se necesitará estar con el ojo bien puesto para evaluar ese proyecto y con el tiempo ir eligiendo el mejor método para poder detectar si está funcionando el programa y si hay autos que estén contaminando y de qué contaminantes”, indicó.
Es un programa que vale la pena evaluar y si llega a funcionar bien, será importante incentivar al ciudadano.
Los túneles funcionan a través de sensores remotos, la idea es que puedan detectar al paso de los vehículos en las avenidas, si bien, no uno por uno, pero sí algunos de estos coches que contaminen, se registraría ese vehículo (o esa placa), lo que se quiere evaluar en el Observatorio es si esos sensores realmente van a ayudar a detectar correctamente a los autos y si hay manera de que se incentive al ciudadano a vigilar e inspeccionar su auto que tenga el catalizador y el chequeo adecuado.
Martínez mencionó que esta inspección será voluntaria, no va a obligar al ciudadano hacerlo.
Es un programa piloto, pero es muy importante que las Ong y los ciudadanos en general “tengan el ojo bien puesto” en este programa para vigilar si es o no efectivo.
Si es efectivo se tendrá que escalar a un siguiente nivel, quizá de elaboración de incentivos para que el ciudadano vea la ganancia de tener su vehículo bien y que no esté contaminando.