Aproximadamente 40 por ciento del agua potable del Estado de México se desperdicia debido a afectaciones, fugas y la edad de la infraestructura de conducción, precisó Jorge Joaquín González Bezares, vocal ejecutivo de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM).
En entrevista, comentó que este fenómeno principalmente se da en los municipios. “Tenemos identificado que 40 por ciento del agua que llega se desperdicia por fugas que tienen que ver con la infraestructura, principalmente municipal que ya es muy vieja, es infraestructura con más de 50 años”.
Explicó que la dependencia ha trabajado en un programa de detección de fugas para evitar que el recurso sea desperdiciado. A través de este mecanismo es que han logrado resarcir el daño en algunos ayuntamientos y con ello resguardar el líquido.
“Tenemos que identificar fugas, tenemos un programa permanente de monitoreo tanto de personal como de tecnología que mide la presión del sistema y demás hemos reparado 31 fugas y aproximadamente 200 litros por segundo”.
De manera adicional, comentó que invierten recursos para el mejoramiento de la red de distribución de los municipios como fue el caso de Nezahualcóyotl, luego de que el año pasado fueran erogados 850 millones de pesos para la sustitución del aparato municipal. En este caso se trató de una red de 250 kilómetros que resultó dañada derivado de los sismos de 2017; sin embargo, el recurso ahora está garantizado para la ciudadanía.
Hace unos días la CAEM también hizo entrega de 8 kilómetros de derrenegar para la comunidad indígena de San Felipe Coamango, en Chapa de Mota, cuya inversión fue de 11 millones de pesos; mientras que, en la comunidad de Zanjillas San Bartolomé, municipio de Villa Guerrero, sustituyeran 11.5 kilómetros de infraestructura hidráulica con una inversión de 6 millones de pesos.
González Bezares llamó a la ciudadanía a sumar esfuerzo con el gobierno para evitar que líquido sea desperdiciado. “Necesitamos una cultura del agua tanto de gobierno como de la ciudadanía y mucha conciencia en el uso del agua porque pues ya vimos que la naturaleza si nos pasa factura, entonces tenemos que atender la solución a este gran reto”.
MMCF