La variabilidad de los precios de productos de la canasta básica que se vive en la actualidad, derivado de la inflación, provoca en los restauranteros incertidumbre y no pueden permitirse incrementar precios de sus menús ya que esto afectaría la venta, indicó Carlos Méndez Tejeda, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Hidalgo.
Expuso que entre los productos que más reflejan esta situación es la harina de maíz, grasas comestibles y el huevo que, esta semana se vende a casi 52 pesos el kilo en la zona centro del país.
“La inflación se vio en 7.8 puntos porcentuales, nada comparada con otros años y sabemos que estamos en la parte más alta con la inflación, pero hay productos como el huevo que, a nivel nacional está en las nubes en Tijuana, por ejemplo, en donde el kilo llegó a 82 pesos el kilo y en el centro se ubica entre los 50 y 52 pesos y eso nos pega directamente.
Aquí la situación es que nosotros no podemos estar subiendo y bajando los precios de las cartas porque es una inversión, pero no entendemos muchos incrementos porque nos dicen que el dólar bajar y sigue subiendo el huevo, o los proveedores nos hacen referencia que no hay granos de maíz por la guerra en Ucrania, o que el problema de las aves con la gripe aviar, lo que suscita una mala información por parte de algunos proveedores, por lo que no sabeos cuál es la situación real y genera incertidumbre”, indicó el líder restaurantero.
Ante ello, explicó que los restauranteros tienen un margen de equilibrio, “y bajamos mermas para evitar este tipo de pérdidas, además de que estamos ofreciendo capacitación a las y los colaboradores para que no haya rotación de clientes en el establecimiento y con ello, amortiguar esta situación.
“Tampoco habrá alzas en los precios de las cartas ya que lo hicieron en enero de este 2023, y fue entre un ocho y un 13 por ciento, similar a lo que sucedió el año pasado, por lo que consideramos terminar el primer trimestre del año con las cartas en estos precios”, dijo.
Por otra parte, Méndez Tejeda indicó que otra situación que está afectando a los restauranteros es la prohibición de tabaco en establecimientos pese a que, en un reglamento anterior se permitía tener zonas específicas para los clientes fumadores, lo que representa ahora una pérdida de entre el 15 a 20 por ciento de las ventas.
“En Hidalgo se han presentado un aproximado de 10 quejosos, diez restauranteros que manifestaron su inconformidad y tienen el derecho porque ellos hicieron una inversión, en muchos casos millonarios, y en donde esta parte queda desprotegida y expuesta”, dijo, no sin antes explicar que estos 10 restauranteros se podrían sumar al amparo colectivo que se realiza a nivel nacional contras estas nuevas disposiciones.