La cuesta de enero del 2021 será más prolongada que la de otros años por la incertidumbre que aún prevalece en torno al curso de la pandemia del covid-19.
Joana Chapa, directora del Centro de Investigaciones Económicas (CIE) de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma de Nuevo León, dijo que este primer trimestre del año será sumamente complicado, dado que muchas familias perdieron su ingreso ante despidos laborales o por la reducción en la jornada o hasta los salarios.
“En enero siempre es un mes donde se tienen que realizar varios pagos (impuestos, refrendo, predial, colegiaturas, además de deudas contraídas durante la época decembrina), pero ahora se suma la falta de empleo e ingresos en muchas familias”.
El CIE estimó que el 2020 registrará caídas en el PIB de hasta un 9 por ciento y no se vislumbra que se haya tocado fondo en términos anualizados, quizá a partir del segundo trimestre se pueda ver una menor caída e inicie la recuperación, pero como la contracción fue muy profunda a la economía le llevará por lo menos 5 años recuperar los niveles previos a la pandemia.
“La pérdida de empleo, reducción de jornadas laborales o disminución de sueldos son elementos que han afectado a miles de familias, lo que viene a agudizar esta cuesta de enero”, señaló.
Para Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), el ajuste de 3.3 por ciento en el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) al tabaco, bebidas azucaradas y combustibles abre boca para una escalada de incrementos que agudizarán la cuesta de enero, la cual estimó que prolongará su duración durante el primer trimestre de 2021.
Consideró que el alza al impuesto para estos productos marca también el arranque del aumento en precios a productos de la canasta básica, de los cuales 23 reportaron un alza de 15 por ciento en promedio en sus precios durante 2020 en comparación con 2019.
Sin embargo, indicó que “este aumento al IEPS más el pago de IVA convierte en una pesada losa la carga fiscal que nos toca pagar a los consumidores mexicanos”.
Además insistió que esta actualización no es más que un aumento de impuesto disfrazado que dará luz verde a una escalada de precios en la canasta básica, que verán incrementados sus precios en frutas y verduras, medicinas, cárnicos (res, pollo, puerco, pescados y mariscos), lácteos, panificación, frijol, el nopal, manzana, zanahoria, confitería (dulces), abarrotes, cerveza, aseo personal, limpieza y ni qué decir del transporte”.
La pandemia ha afectado profundamente a la actividad económica de los países, y México no ha quedado excluido.
Rivera también dijo que el ajuste implica que los consumidores pagarán 5.11 pesos y 4.31 pesos de IEPS por litro de gasolina Magna y Premium, respectivamente, así como 1.30 pesos por cada litro de bebida azucarada y 0.51 pesos por un cigarro.
“Tenemos que estar preparados de que el 2021 será un año todavía complicado con efectos de la pandemia y va a seguir condicionando la actividad del mercado”.
Covid presiona las finanzas estatales
La Secretaría de Finanzas y Tesorería del estado señaló tener la esperanza de que los ingresos proyectados en el Paquete Fiscal del 2021 se mantengan con ayuda de la recaudación de impuestos, a pesar de la cuesta de enero en plena pandemia por el coronavirus.
Carlos Garza Ibarra, tesorero de Nuevo León, indicó que el covid-19 ha sido la presión más importante que han enfrentado; sin embargo, recalcó que enero no es un mes tan complicado desde el punto de vista del gasto, sino más desde los ingresos.
El reto más importante que tendrá el estado, consideró, es recaudar los impuestos vehiculares, los de nómina y los de catastro, esto para dejar una administración con menos déficit de los 8 mil 606 millones de pesos proyectados para este año, pues la administración de Jaime Rodríguez concluye a finales del 2021 para dar entrada a la siguiente.
“Creo que el dato más importante en el que tenemos que enfocarnos es en la proyección de la recaudación del impuesto sobre nómina, quisiéramos (que se recaude más), desafortunadamente tanto la parte vehicular y la de nómina están ligados a la parte económica y nuestras proyecciones han sido más conservadoras para no tener algún tipo de riesgo en quedarnos cortos con esta captación”, indicó Garza.
Otro de los retos de la Tesorería es que el gasto presupuestado no se incremente más, ya que el déficit sería mayor para este año, pero con la pandemia que no cesa, la proyección podría cambiar en cualquier momento.
Escalada
Para Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec, el ajuste de 3.3 por ciento en el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) al tabaco, bebidas azucaradas y combustibles abre boca para una escalada de incrementos que agudizarán la cuesta de enero, la cual estimó que prolongará su duración durante el primer trimestre de 2021.
Metas
El reto más importante que tendrá el estado, consideró, es recaudar los impuestos vehiculares, los de nómina y los de catastro, lo anterior para dejar una administración con menos déficit de los 8 mil 606 millones de pesos proyectados para este año, pues la administración de Jaime Rodríguez Calderón concluye a finales del 2021.