El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), a través del Instituto de Ecología (Inecol), elaboró la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) en su modalidad regional para el Tramo 5 Sur del Tren Maya, –que va de Playa del Carmen a Tulum– y que finalmente sometió a análisis para su autorización ante la Dirección General de Impacto Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en el que se reconocen afectación al sistema de cuevas, cenotes y cavernas de la zona.
Los expertos que elaboraron el estudio reconocen que “existen gran cantidad de dolinas, cenotes, microcúpulas kársticas, lagunas y llanuras de inundación, estas últimas con dimensiones de metros hasta kilómetros, presentando formas circulares, alargadas e irregulares”, por lo que proponen medidas de mitigación para evitar daños.
“Existe una conexión entre las descargas en la zona de la costa y el impacto producido por actividad antropogénica, por lo que es indispensable proponer medidas de mitigación al ecosistema que forma el karst, cenotes, descargas de agua en la playa y en las lagunas”.
Además, describen que el tramo 5 del Tren Maya, se localiza en el acuífero Miocénico, próximo a la costa, donde los componentes principales del flujo subterráneo descargan en el mar caribe o sobre la cara de la playa.
El documento aún no se publica oficialmente a través de la Gaceta Ecológica de la Semarnat, pero un Resumen Ejecutivo de la MIA, de solo 86 páginas y con diversas reservas a su contenido, ha circulado a través de los integrantes del colectivo Sélvame del Tren.
"A partir de la evaluación de los impactos ambientales que generará el proyecto sobre todas las componentes de los factores geoformas y agua que integran el Sistema Ambiental Regional, se concluye que en total se generarán impactos ambientales no significativos”, indica el resumen ejecutivo.
Indica también que los impactos generados, se producirán en la etapa de preparación del sitio y construcción, mientras que en la etapa operativa y de mantenimiento serán mitigables.
“Dentro de los impactos observados debido a la realización del proyecto, destacan aquellos relacionados con el agua, en particular los relacionados con los procesos hidrológicos, que resultan de la posible interacción en el Tramo 5 Sur del trazo del proyecto con los sistemas kársticos, los cenotes, los flujos subterráneos y la posible afectación de la conectividad hidrológica natural”.
Señalan que es necesario poner atención al balance hídrico local, de tal manera que sea mínima la alteración de los escurrimientos superficiales, la reducción de las áreas de infiltración y de evapotranspiración, asimismo es importante conservar la integridad de los flujos subterráneos de tal manera que se preserven los ríos subterráneos.
Por otro lado, es necesario prestar atención al manejo de las aguas residuales, aceites y combustibles para que se asegure que no entren en contacto con las aguas subterráneas, a efecto de evitar su contaminación.
Aunque a lo largo del texto se reconocen las afectaciones al sistema kárstico, sus conclusiones dicen que los impactos no serán significativos.
JLMR