La presidenta de la Mesa Directiva del Senado, Mónica Fernández Balboa, dijo que aunque fue “un gran dilema” decidió no iniciar un juicio de procedencia por los jaloneos que se dieron durante la toma de protesta de Rosario Piedra Ibarra al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Señaló que aunque fue una decisión difícil, su labor es llamar al equilibrio y la concordia, y de presentar una denuncia se generarían muchas confrontaciones al interior del Senado.
“Ha sido un gran dilema porque ninguna violencia puede ser justificada, ha sido un gran dilema para su servidora el si tenía que poner la denuncia o no, porque no podemos permitir este tipo de acciones.
“Analizamos y mi responsabilidad es llamar a la concordia, al equilibrio y por eso no presenté la denuncia, vamos a seguir trabajando para construir acuerdos y comenzaremos un procedimiento el próximo miércoles de acción contra violencia de mujeres en el Senado. Se generaría muchas confrontaciones con una denuncia”, indicó.
El 12 de noviembre, Piedra Ibarra rindió protesta como titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pero un grupo de senadoras de Morena forcejearon con el panista Gustavo Madero, quien días después buscó disculparse con la presidenta de la Mesa Directiva.
evl