Tras la toma de protesta de Claudia Sheinbaum Pardo como la primer mujer presidenta en la historia de México, los pueblos indígenas volvieron a realizar la tradicional ceremonia de entrega del bastón de mando el día de hoy, refiriendo la responsabilidad a la nueva mandataria.
Anteriormente, el 1 de diciembre de 2018, cuando el ex presidente López Obrador tomó protesta, recibió por parte de 68 pueblos originarios del país el simbólico bastón, mismo que hoy fue entregado a Sheinbaum.
En MILENIO te explicamos qué es y qué representa el bastón de mando que se le entregó a Claudia Sheinbaum, la encargada de continuar con el proceso de la cuarta transformación al asumir el cargo de presidenta de la República Mexicana.
¿Qué simboliza el bastón de mando?
Milvet Alonso utiérrez, doctora en Estudios Hispánicos, señaló en un artículo que el bastón de mando es un elemento significativo en varias culturas indígenas de México, pues simboliza la máxima autoridad, tanto espiritual como política, de quien lo ostenta
En términos culturales, los listones de colores que lo adornan aluden a elementos de la cosmogonía de las comunidades que lo otorgan, y de acuerdo con datos obtenidos de la Organización Nacional Indígena en Colombia:
- El verde representa a la naturaleza.
- El rojo representa la sangre derramada por los antepasados.
- El azul representa el agua.
- El negro representa a "La Madre Tierra".
- El amarillo representa la riqueza de los pueblos indígenas.
Tradicionalmente, el bastón se entrega a una autoridad de la comunidad indígena que asume un cargo político y representa respeto a la aceptación del cargo así como el buen gobierno de los pueblos y para los pueblos.
Sin embargo, el bastón de mando también es concedido a la autoridad que se comprometa a defender los usos y costumbres de las comunidades indígenas.
Sheinbaum recibe bastón de mando por parte de pueblos indígenas
Este martes 1 de octubre, en una ceremonia en el Zócalo capitalino, Claudia Sheinbaum recibió el bastón de mando, un objeto emblemático que representa el poder político y espiritual que une al gobierno con las comunidades indígenas y afromexicanas.
Esta ceremonia marca el inicio formal de su mandato, el cual se extenderá del 2024 al 2030, y refuerza su compromiso con la continuidad de los ideales de la cuarta transformación, impulsados por su predecesor.
"Estamos todos los pueblos unidos para seguir trabajando (con usted) y poniendo en alto en nuestras comunidades", dijo una de las guías espirituales durante el ritual.
Al momento de recibirlo, fue respaldada por los 70 pueblos indígenas y afromexicanos como la presidenta constitucional de México.
"Usted es una persona sensible, honesta y comprometida con las causas sociales como la ha dicho con los más pobres, los pueblo indígenas y afromexicanos, la verdad más íntima y raíz cultural de nuestra identidad nacional. Estamos aquí con toda la fuerza de nuestra historia y cultura para saludarla, respaldarla y acompañarla con amor y humildad en el caminar que hoy inicia".
ARR