El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que la reforma electoral que se discute actualmente en el Congreso de la Unión no busca desaparecer al Instituto Nacional Electoral (INE) ni al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), sino acabar con el sistema corrupto.
En su conferencia mañanera de Palacio Nacional, el mandatario indicó que la iniciativa tiene como propósito terminar con las prácticas antidemocráticas, ya que en la actualidad se encuentra en poder de los conservadores, que son capaces de hacer un fraude, “como ya lo han hecho y eso hay que evitarlo”.
- Te recomendamos La Mañanera de AMLO. Los temas del 6 de octubre Política
“Aprovecho para informar que es una reforma electoral para que haya democracia, no es desaparecer al órgano encargado de organizar las elecciones, eso no va a desaparecer, ni tampoco el tribunal encargado de calificar las elecciones. Lo que no queremos es que continúe este sistema corrupto”, dijo.
López Obrador acusó que existe una campaña de desinformación por parte de quienes manejan al INE, “que son conservadores, que siempre han estado en los fraudes electorales”, y que tienen una campaña tratando de engañar a la gente.
“Estos son capaces de hacerlo, ya lo hicieron, no una vez, sino varias veces. Aclarar esto”, agregó.
En este sentido, destacó el sistema electoral de Brasil por su eficacia y seguridad, y confió en que si hay voluntad suficiente se podría implementar cambios a la contraparte mexicana, con el fin de terminar con los fraudes.
En este sentido, el jefe del Ejecutivo federalrespaldó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), luego de que emitiera una recomendación para transformar al INE, por considerar que mantiene vicios que han manchado los procesos electorales
Comentó que los conservadores no le perdonan a Rosario Piedra, comisionada presidenta de la defensoría nacional, que sea hermana de Jesús Piedra Ibarra, quien perteneció a la Liga Comunista 23 de septiembre, grupo que asesinó al empresario Eugenio Garza Sada.
“No sé cómo dicen ser católicos y no perdonan, entonces cualquier propuesta que viene de la Comisión (Nacional) de Derechos Humanos en ese sentido o en otro, siempre va a ser mal vista por el conservadurismo”, apuntó.
LP