La jornada de revocación de mandato resultó positiva para el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y está funcionando como una ratificación en el cargo; pese a que, en la realidad, el ejercicio fue inútil ante la baja participación de los electores.
En el punto anterior coincidieron, por separado, los investigadores en ciencias políticas, Paulino Ernesto Arellanes Jiménez, académico de la Maestría en Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Puebla (BUAP); Claudia Ramón Pérez, investigadora de la Facultad de Ciencia Política de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep); y Herminio Sánchez de la Barquera, decano de Ciencias Sociales de la Upaep.
Por un lado, Arellanes Jiménez destacó que el presidente de México está aprovechando la jornada de revocación de mandato para dar a conocer que, la mayoría de los ciudadanos quiere que continúe al frente del gobierno; y resalta que su oposición no acudió a expresar su opinión en las urnas.
Destacó que, de alguna manera, desde antes de la jornada de revocación de mandato, ya se tenía una idea de lo que sucedió, una baja participación y el triunfo de la continuidad del presidente de México, ante lo cual, falta un mayor trabajo de la oposición para las próximas elecciones.
Por su parte, Claudia Ramón Pérez, investigadora de la Facultad de Ciencia Política de la Upaep, resaltó que se cumplieron los pronósticos de una baja participación de electores, menos de uno de cada cinco.
Destacó que, aunque el ejercicio está planteado como una revocación de mandato, en realidad, está funcionan do como una ratificación en el cargo, con lo que, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se legitima.
“El ejercicio está planteado como Revocación de Mandato, pero en realidad, está funcionando como ratificación de mandato. Cuando se habla de ratificación, es un ejercicio que permite legitimarse. Dijimos que no había necesidad dado los índices de popularidad y aprobación con el que cuenta el mandatario, pero no es lo mismo tener estos porcentajes que tenerlos a raíz de la consulta, independientemente, de cuántos participaron. La mayoría refrendó al mandatario y es una herramienta que le permite decir: ya vieron, me legitimé, sigan confiando en mí”, destacó.
Señaló que, los resultados de la jornada de revocación de mandatario serán ocupados por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, para dar continuidad a sus proyectos de obras que habían sido cuestionados.
“Ahora, podrá decir que están de acuerdo con su mandato y con sus proyectos. Podrá decir: ahora, vamos a realizar los proyectos, aunque la oposición, o como quieran llamarles, se opongan. Este fue el elemento fundamental de la consulta, relegitimar y consolidad el ejercicio de poder del presidente de México”, apuntó.
En tanto, Herminio Sánchez de la Barquera, Decano de Ciencias Sociales de la Upaep, calificó como un ejercicio inútil y costoso la jornada de revocación de mandato porque sus resultados no son vinculantes ante la baja participación.
“Con este porcentaje de aprobación que tiene el presidente ¿Qué necesidad se tenía de hacer un ejercicio de revocación de mandato que cuesta mucho dinero? Representó una pérdida de tiempo para las personas. Para mí, no tenía caso ir a votar porque un presidente con ese porcentaje de aprobación no tiene necesidad de ningún proceso de esta índole”, resaltó.
AFM