El titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer, aseguró desconocer dónde están las mil 560 obras públicas que sus antecesores en la dependencia reportaron el sexenio pasado.
“Nosotros no tenemos registro de una sola; cuando llegamos a la administración vimos todo lo que es el antecedente de los expedientes, no tenemos información de dónde están esas mil 560 obras que hicieron en la administración pasada; por lo menos nosotros no, no sé si las entidades federativas tengan esa información. Hemos visto un par de logos por ahí, pero no sabemos dónde están”, dijo.
Al comparecer ante comisiones de la Cámara de Diputados para la glosa del quinto informe de gobierno, el funcionario respondió al legislador priista Alan Castellanos, quien soslayó las mil obras realizadas por la Sedatu durante la actual administración, en contraste con las mil 560 reportadas durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.
“En el sexenio pasado se rehabilitaron poco más de cinco mil espacios públicos, de los cuales mil 560 fueron espacios nuevos. Contra las mil obras que en su intervención nos vino a exponer, me parece que hay una gran diferencia”, dijo.
En su presentación ante los diputados de las comisiones unidas de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial, de Vivienda, de Zonas Metropolitanas y de Movilidad, Meyer detalló que durante su gestión se ha realizado más de mil obras de desarrollo urbano, construcción de equipamientos, espacios públicos y obras de infraestructura social.
La mayoría de ellas en las zonas de más rezago y marginación, y con una inversión cercana a los 33 mil millones de pesos, que, sumado el gasto en vivienda, ha generado más de 400 mil empleos.
El secretario sostuvo que las administraciones pasadas dejaron “miles de viviendas abandonadas, cuartos rosas que no se construyeron, supuestos apoyos para la reconstrucción que nunca llegaron e instrumentos de planeación que nunca se hicieron”.
Señaló que la Sedatu logró de diciembre de 2018 hacer más con menos e incluso cerrará el sexenio de López Obrador con un gasto 30 por ciento menor con respecto al anterior gobierno.
Por ello, dijo, con la reducción del presupuesto ya no se construirá obra nueva el próximo año.
“No nos vamos a meter a hacer obra nueva, sino asegurar que la que hoy en día está en proceso, se concluya adecuadamente; no todo se resuelve con el presupuesto, sino con el ejercicio adecuado del gasto”, indicó.
Afirmó, sin embargo, que el presupuesto asignado para 2024 es adecuado y con él se podrá hacer más con menos y entregar buenas cuentas al cierre del gobierno.
MO