El gobernador de Texas, Greg Abbott, pidió ayuda a los gobernadores de las 50 entidades que componen a EU para atacar la “crisis fronteriza” bajo la que se encuentra, con respuesta inmediata de su aliado de Florida, Ron DeSantis, y más tarde de otros 23 gobernadores republicanos.
El gobierno local informó que Abbott envió cartas a cada uno de sus homólogos, donde les pide “apoyar los esfuerzos de seguridad fronteriza sin precedentes de Texas”, ante la “continua negativa de hacer cumplir las leyes federales de inmigración” del presidente demócrata Joe Biden.
“La avalancha de actividad fronteriza ilegal invitada por la administración Biden fluye directamente a través de la frontera sur hacia las comunidades de Texas, pero esta crisis no se detiene en nuestro estado”, alertó en la carta.
La oficina del ejecutivo texano señala que el estado ha “gastado más de 4.5 mil millones de dólares desde 2021” para hacerle frente a la seguridad fronteriza y reitera que en el Congreso local se buscan “4.6 mil millones adicionales para los próximos dos años”.
Estas cifras las maneja el estado en el documento para resaltar el reproche de Abbott a sus colegas, pues afirma que “Texas no debe asumir solo la carga financiera de proteger a la nación”.
Abbott afirma que “en ausencia del gobierno federal, nosotros, como gobernadores, debemos unirnos para combatir la actual crisis fronteriza de Biden y garantizar la seguridad que todos los estadunidenses merecen”.
Por ello remite, para justificar su pedido al Pacto de Asistencia para el Manejo de Emergencias que “faculta a los estados a brindarse asistencia entre sí en tiempos de desastre o emergencia, los cuales describen con precisión la crisis fronteriza actual”.
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Agradeció a los gobernadores de Idaho, Brad Little, y de Florida, Ron DeSantis, por “ofrecer asistencia para asegurar la frontera sur”.
Luego de enviar la carta, casi de inmediato el gobernador DeSantis anunció el envío de mil 100 activos y recursos.
“Bajo mi dirección, las agencias estatales, incluidas las fuerzas del orden público y la Guardia de Florida, se están desplegando en Texas, con activos que incluyen personal, botes y aviones”.
Entre los agentes enviados a Texas destacan 101 policías de la Patrulla de Carreteras, 200 oficiales del Departamento de Cumplimiento de la Ley, 800 soldados de la Guardia, cinco aeronaves “con equipo de monitoreo” y 17 drones, entre otros.
Al anuncio de Abbott se sumaron prácticamente todos los gobernadores de su partido, quienes emitieron una declaración en apoyo del gobierno texano.
A través de la Asociación de Gobernadores Republicanos, 24 ejecutivos estatales, encabezados por la mandataria de Iowa, Kim Reynolds, afirmaron que Abbott “ha ejemplificado el liderazgo en un momento crítico; apoyamos los esfuerzos para asegurar la frontera” ante el “fracaso de la gestión de Biden tras el fin del Título 42”.
Los gobernadores republicanos asocian su apoyo no solo al paso migratorio ilegal, sino a combatir el narcotráfico.
México suma 26,535 agentes
El gobierno de México reforzó en últimos 15 días la seguridad en las fronteras del país con 690 integrantes de las fuerzas armadas.
De acuerdo con los informes del gabinete de seguridad, el “plan de migración en la frontera norte y sur” contaba con 25 mil 845 elementos hasta el 2 de mayo y en las últimas dos semanas esta cifra se incrementó a 26 mil 535.
Este refuerzo se da tras el fin del Título 42 y el incremento de migrantes en el territorio nacional que buscan llegar a EU.
El despliegue de la Guardia y fuerzas armadas es de 253 mil 493 elementos, de los cuales 190 mil 914 están destinados a seguridad, solo detrás están los más de 26 mil que cuidan las fronteras.