El pleno del Senado guardó un minuto de silencio y rindió un homenaje a la memoria de Enrique González Pedrero, quien falleció el 6 de septiembre, y se distinguió por ser uno de los intelectuales y políticos más reconocidos de nuestro país.
La presidenta de la Mesa Directiva, Olga Sánchez Cordero, externó las condolencias de los integrantes del Senado a los familiares y amigos de quien fue historiador, diplomático, senador y escritor.
Dijo que México pierde a un gran humanista, a una excelente persona, que dejó un gran legado político e intelectual, ubicándose como uno de los tabasqueños más connotados en la vida pública del país.
González Pedrero fue gobernador de Tabasco y director del Fondo de Cultura Económica, embajador de México en España. Autor de más de 30 libros a lo largo de su vida, también fue impulsor de la cultura y la educación en México, desde la academia y desde el ejercicio del poder.
Sánchez Cordero recordó que el político también se desempeñó como senador y presidente de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos.
Además, se destacó como egresado y maestro de la Universidad Nacional Autónoma de México, director de la Escuela Nacional de Ciencias Políticas, investigador del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM y miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
Desde su escaño, la senadora Mónica Fernández Balboa, de Morena refirió que González Pedrero fue un tabasqueño que se caracterizó por su calidad humana e integridad política. “Fue ante todo un maestro, que combinó, como pocos, la teoría y la práctica política”.
José Antonio Cruz Álvarez Lima, senador de la misma fracción parlamentaria, lo recordó como un hombre de izquierda que luchó por la libertad y la justicia.
La senadora del PRI, Beatriz Paredes, expresó que González Pedrero siempre aportó para todas las trincheras en las que participó, tanto al mundo académico, como al político en el país.
Por el PRD, el senador Juan Manuel Fócil Pérez asentó que el legado del ex gobernador de Tabasco quedará presenté en todas las responsabilidades que ocupó, como político, escritor, diplomático, intelectual, académico y editor.
JLMR