La tribuna del Senado de la República fue tomada por menores de edad, quienes lazaron un mensaje a los legisladores: “queremos vivir en un mundo de paz”.
El Pleno del Senado rindió un minuto de aplausos a los más de 30 millones de niñas y niños que viven en México, y les cedió la tribuna y la palabra a cinco de ellos para que expresaran a la Asamblea las demandas y preocupaciones de este sector de la población.
Al conmemorar el Día de la Niña y el Niño, festejo propuesto por la presidenta de la Comisión de la Niñez y la Adolescencia, la panista Josefina Vázquez Mota, los menores coincidieron por separado, en vivir en un país donde se les proteja.
Samantha Portillo Mendoza, originaria de Tlaxcala hizo su presentación en náhuatl y, posteriormente, expresó:
“La paz, palabra importante que simplemente es vivir en armonía... Todos debemos poner un granito de arena desde el lugar o espacio que nos encontremos para construirla… Quiero seguir viviendo en este país donde me cuiden, me guíen, me protejan. Sueño y quiero tener un país y mundo lleno de oportunidades, donde las niñas y los niños disfruten de su libertad”.
Rafael Daniel García Bautista, oriundo de Tabasco, dijo sentirse orgulloso de venir de la misma tierra en la que nació el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Soy un tabasqueño de corazón. Vengo de la tierra del señor presidente Andrés Manuel López Obrador… “Lo repito uno y mil veces, veo y felicito, y le mando un gran saludo a mi paisano, al señor presidente, licenciado Andrés Manuel López Obrador a quien admiro mucho por la lucha que da para transformar nuestro país”, subrayó.
Añadió que “para ser la voz de todos los niños mexicanos, y desde aquí les digo, en nombre de ello, todos queremos paz, queremos un mundo lleno de alegría, de armonía, todos merecemos vivir en paz, ser escuchados”.
Olga Sánchez Cordero, presidenta del Senado, recordó que fue José Vasconcelos, secretario de Educación Pública, quien instauró el Día del Niño.
En su intervención, la presidenta de la Comisión de los Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, Josefina Vázquez Mota, destacó que esta conmemoración está dedicada a todas las y los niños que viven rodeados de amor, pero también a aquellos que viven el infierno de la violencia, la crueldad y la muerte, a quienes trabajan para sobrevivir, a los que no han encontrado justicia y a los que son cooptados por el crimen organizado.
Daniel García advirtió que “la paz es un concepto ideal de felicidad, alegría, armonía y libertad, pero, desgraciadamente, poco a poco se ha ido apagando, dejándole a mi generación todo lo contrario: temor, inseguridad e infelicidad.
En tanto, Renata Morales dijo que le preocupan las niñas y niños que trabajan en las calles, en los semáforos, limpiando parabrisas, vendiendo dulces o flores, incluso durante la noche, en lugar de estar estudiando.
EHR