"Presidente, sin presa no hay refinería", presionó el gobernador Jaime Rodríguez Calderón ante Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, y Graciela Márquez, secretaria de Economía, en su visita a Nuevo León.
Durante la 75 Asamblea General Ordinaria de la Caintra Nuevo León, en Cintermex, el mandatario estatal compartió lo que le ha dicho a Andrés Manuel López Obrador en relación a la construcción de la presa Libertad y la remodelación de la refinería de Cadereyta.
"Este reconocimiento que hago público al Presidente, también le he dicho: Presidente, sin presa no hay refinería, si no tenemos agua, no podemos estarle dando el agua de uso doméstico a la refinería que produce los combustibles que necesita.
"(...) el Presidente nos va a ayudar, pero requerimos que ya no sea en base a la petición y a la dádiva, eso tenemos que acabarlo con cada Presidente, cada gobernador, a mí me pasa", dijo.
En entrevista, Rodríguez Calderón dijo que no se refirió a una condicionante en la remodelación de la refinería, sino de un ejemplo de lo que ha hablado con AMLO.
"Lo dije no porque nos den el dinero para la presa, nos darán una reserva de agua, no solo la refinería sino todo el resto de empresas, no es una condicionante", aclaró.
Además, "El Bronco" señaló que busca un trato fiscal justo y no como actualmente se encuentra, por lo que Nuevo León ha sido castigado, ya que obligan a los estados a ir generando una carga fiscal mayor.
"Quiero hablar con mi amigo Poncho y mi amiga secretaria de Economía, no se me vayan a sentir, es en buena onda:
"¿Cómo funciona la Federación?, La ley de Coordinación Fiscal hoy es injusta, antes era benévola, pero se ha convertido en una de las más maléficas, hay que ir buscando la posibilidad de la reforma para que sin detrimento de otros estados que no han salido adelante, no tengamos los otros estados salir un poco adelante, remolcarlos, porque si no resolvemos esa grieta será más profunda y va a amenazar con llevarlos a un colapso, no solo económico, sino social", dijo.