Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, informó que el gobierno de México ha establecido contacto con connacionales que radican en Sudán para acelerar su salida del país tras un conflicto armado en ese país.
A través de Twitter, Ebrard indicó que la embajada de México en Egipto se está contactando con los mexicanos que viven en Sudán.
"Estamos en contacto con mexican@s en Sudán a través de nuestra Embajada en Egipto para acelerar su salida del país dados los acontecimientos. Les informo situación y avances", escribió en Twitter.
La embajada de México en Egipto puso a disposición de connacionales en Sudán el número +20 109 326 9490 y el correo oficialrae@sre.gob.mx para contactarse con las autoridades mexicanas en caso de requerir asistencia.
Al menos 56 civiles murieron, entre ellos tres empleados de la ONU, en las últimas 24 horas en Sudán, en donde el ejército y un poderoso grupo de paramilitares se enfrentan este domingo por segundo día consecutivo.
La violencia estalló el sábado en medio de una lucha por el poder entre los dos generales que protagonizaron el golpe de Estado de 2021.
El domingo, el ejército regular y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) se enfrentaban con armas pesadas en los suburbios del norte de la capital, Jartum, y en el sur de la ciudad, según testigos.
El conflicto lleva semanas gestándose, impidiendo un acuerdo político en uno de los países más pobres del mundo. Desde la revuelta popular que derrocó a Omar al Bashir en 2019, Sudán intenta celebrar sus primeras elecciones libres tras 30 años de dictadura.
Durante el golpe de Estado que puso fin a la transición democrática en octubre de 2021, el jefe del ejército, Abdel Fatah al Burhan, y el jefe de las FAR, el general Mohamed Hamdan Daglo, conocido como Hemedti, unieron sus fuerzas para expulsar a los civiles del poder.
Pero la rivalidad entre los dos generales degeneró en violencia el sábado.
Ambas partes se culpan mutuamente de las violencias y afirman controlar lugares clave de la capital.
Daglo anunció la toma del aeropuerto internacional de Jartum y del palacio presidencial, pero el ejército asegura que los sigue controlando.
JLMR