La cancillería mexicana rechazó la nueva ley SB4 que la Cámara de Representantes de Texas aprobó este martes, que permite a autoridades locales y estatales detener a personas que sospechen que hayan ingresado sin documentos al estado.
La ley incluye la creación de dos nuevos delitos por ingresar y reingresar ilegalmente a Estados Unidos por su territorio y permite a jueces expulsar a los migrantes de forma inmediata.
“El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, externa su rechazo ante estas medidas antiinmigrantes que pretendan detener el flujo de personas migrantes, mediante su criminalización, lo que resultará en la separación de familias, discriminación y perfilamiento raciales”, apuntó la SRE en un comunicado.
La cancillería apuntó que reconoce la soberanía de cada país con respecto de sus políticas públicas, pero externó que México también tiene el derecho de proteger los intereses de los mexicanos en Estados Unidos y de establecer sus propias políticas internas, por lo que rechazó el que se pudiera expulsar migrantes hacia México.
Además, respaldó el trabajo conjunto que ya se realiza con la administración de Joe Biden, para lograr una migración ordenada, segura, regular y con respeto a los derechos humanos.
“México expresa además su preocupación ante el paquete de medidas legislativas que afectará los derechos humanos de las más de 10 millones de personas de origen mexicano que residen en Texas, al propiciar ambientes hostiles que pueden derivar en actos o crímenes de odio en contra de las comunidades migrantes”, explicó la cancillería sobre estas medidas, además de señalar su rechazo a cualquier medida que implique retornos involuntarios de los migrantes.
Finalmente la SRE detalló que las once representaciones consulares de México en Texas recibieron las siguientes instrucciones:
- Aumentar sus encuentros con autoridades aliadas, legisladores y agrupaciones de derechos civiles para reforzar la presencia en el estado.
- Celebrar una reunión virtual o en Austin con el Grupo Asesor de Derechos Civiles (MCRAG, por sus siglas en inglés) para explorar acciones de colaboración en beneficio de la población de origen mexicano.
- Realizar jornadas informativas sobre dichas medidas legislativas.
- Impresión y distribución de material preventivo en puntos de distribución clave.
- Reforzar la campaña Conoce y ejerce tus derechos y el número del Centro de Información a Personas Mexicanas (CIAM), que opera 24 horas, los siete días de la semana, en medios de comunicación, redes sociales y a través de agrupaciones aliadas.
- Llevar a cabo con apoyo de aliados locales jornadas de diagnósticos migratorios gratuitos.
- Brindar asesoría legal y migratoria gratuita a través de los y las abogadas del Programa de Asesorías Legales Externas (PALE).
- Reforzar la vinculación con la comunidad mexicana en su circunscripción para identificar sus inquietudes y necesidades.
El gobierno mexicano insistió en que mantendrá la colaboración con su par estadunidense para abordar el fenómeno migratorio y para proteger los derechos de los mexicanos en el extranjero.
“La Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de su red de consulados en el estado de Texas, estará atenta para responder a cualquier violación por parte de las autoridades y explorará apoyar litigios estratégicos para salvaguardar sus derechos humanos”, concluyó la cancillería.
SNGZ