Con los temas de seguridad, migración, tráfico de armas, diferencias en materia energética y maíz transgénico en el marco del T-MEC, así como el fentanilo, la próxima Reunión Interparlamentaria México-Estados Unidos tendrá lugar la última semana de junio en la ciudad de Washington.
Así lo confirmó el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de la República, Héctor Vasconcelos, quien instó a los integrantes de la delegación mexicana a olvidar sus ideologías y diferencias partidistas para cerrar filas en defensa de los intereses nacionales y la soberanía ante la iniciativa de congresistas norteamericanos para que el Ejército de Estados Unidos combata al narcotráfico en el territorio nacional.
El legislador de Morena subrayó la necesidad de reanudar los encuentros con los representantes estadunidenses, tras su interrupción por dos años como consecuencia de la pandemia de covid-19.
Recordó que las reuniones interparlamentarias comenzaron en febrero de 1961 y han permitido dar seguimiento a diferentes temas como amenazas regionales, intercambio comercial, migración, seguridad fronteriza, tráfico de drogas y medio ambiente, entre otros.
Vasconcelos sostuvo que entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y su homólogo Joe Biden existe una excelente relación en su calidad de jefes de Estado, por lo que la relación bilateral debe continuar por el camino de la comunicación, la tolerancia y el entendimiento, con respeto a la soberanía de cada país.
“En algún momento han existido momentos ríspidos con algunas agencias y legisladores de ese país, pero no significa que tengamos roces con la Casa Blanca, porque ambas partes hemos tenido un gran cuidado en que no se dañe o vulnere la columna dorsal que es la relación del gobierno mexicano y estadounidense”, señaló.
Como ejemplo de ello recordó que durante la última visita del responsable para el clima de Estados Unidos, John Kerry, éste sostuvo que percibe sabiduría en el liderazgo del presidente Andrés Manuel López Obrador, porque quiere deshacer algunos errores del pasado para promover los intereses del pueblo.
Reconoció, sin embargo, que los próximos meses serán complicados, pues, en vísperas de las elecciones en Estados Unidos, algunos políticos norteamericanos intensificarán sus posturas contra México con el fin de obtener votos en las elecciones de noviembre.
“Esto no va a afectar la relación entre los dos países, porque ambos gobiernos están interesados en sostener y preservar el T-MEC, para que dé sus mejores frutos y para ello es necesario que la relación de ambos pueblos siga funcionando, independientemente de las cuestiones electorales que durante un año y medio seguirán presentándose”, dijo.
LG