La moneda está en el aire. Este año como nunca antes, no hay claridad en quién se quedará los próximos cuatro años en la silla de la presidencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Las grillas internas y la creación de dos bloques, han convertido casi en un misterio la renovación de la presidencia que debe concretarse este miércoles 4 de noviembre.
Los nombres de quienes podrían quedarse ahí están claros, pero los votos de los que podrían apoyar a cada uno, aún no.
En las últimas horas, los magistrados han intensificado sus negociaciones políticas en medio de una franca división y diferencias entre ellos.
El nombre de la magistrada Mónica Soto Fregoso se sumó a la lista de posibilidades por su perfil negociador y por tratarse de una mujer que podría impulsar el relevo femenino de Fuentes Barrera tras la renuncia en enero de 2019 de Janine Otálora.
Otros suenan como viables, pero no está en sus intereses ser los responsables de lograr la unidad entre los magistrados.
Mientras que el actual presidente Felipe Fuentes Barrera aspira a la reelección y tanto confía en el respaldo del bloque que ha construido al interior de la Sala Superior, que ya programó su informe de actividades para el 9 de noviembre, como si tuviera la certeza de que seis días después de la votación, seguirá con el mismo cargo.
Estos son los nombres más sonados, sus fortalezas y debilidades:
Felipe de la Mata Pizaña
De la Mata fue el primero en sonar como el relevo de Felipe Fuentes Barrera al ser uno de sus más cercanos y a quien el bloque que lidera el actual presidente de la Sala Superior podría respaldar.
Sobre todo, cuando fue el único que le reconoció sus dos años como presidente al compartir en su cuenta de Twitter una fotografía juntos con el siguiente mensaje:
“Estimado amigo, @FfuentesBarrera estoy convencido que eres un gran presidente de esta casa de la justicia electoral mexicana y que hoy el TEPJF es una institución más sólida que hace 2 años que iniciaste tu exitosa gestión. Gracias”, escribió.
Sin embargo, ante la división que caracteriza en estos momentos a la Sala Superior, De la Mata ha externado al interior del Tribunal Electoral que no está del todo interesado en quedarse al frente.
Es el único magistrado hombre que concluye su periodo hasta el 31 de octubre de 2025, y podría resolver el rumbo y descenlace de la contienda presidencial del 2024.
Mónica Soto Fregoso
Con la idea de que se quede en la presidencia un perfil mediador el cual pueda llamar a la unidad y acabar con la división y las grillas actuales entre los magistrados, Mónica Soto Fregoso suena como otra de las posibilidades más viables para quedarse en la presidencia de la Sala Superior, con el plus de que se trataría de un relevo femenino.
Ante la relevancia que ha tomado el género, equidad e impulso a las mujeres para las próximas elecciones, las autoridades electorales han buscado dar el ejemplo en estos temas y varios han considerado que Soto puede ser un gran perfil, no solo por tratarse de una mujer capacitada sino por su labor en construir acuerdos.
Soto no tiene ninguna riña al interior de la Sala Superior y aunque la mayoría de las ocasiones se suma al bloque de Felipe Fuentes Barrera, sus votaciones suelen ser argumentadas y no con fines de mayoriteo.
Además, su periodo como magistrada también concluye hasta el 31 de octubre de 2025.
Indalfer Infante Gonzáles
Otro de los magistrados que han sonado para el relevo es Indalfer Infante Gonzales quien tampoco tiene conflictos al interior de la Sala Superior y que incluso, aunque la mayoría de las ocasiones se ha sumado al bloque de Fuentes Barrera, también ha manifestado su desacuerdo en decisiones polémicas como pedirle al INE que modificara la convocatoria para la renovación de la dirigencia de Morena cuando el proceso estaba en curso.
Este magistrado ha optado por votaciones razonadas tanto a favor como en contra de ambos grupos. Por lo que podría ser respaldado por Janine Otálora y Reyes Rodríguez Mondragón.
Sin embargo, es junto con José Luis Vargas Valdez el que concluye su periodo de manera más próxima, pues sólo estará en funciones hasta el 31 de octubre de 2023, lo que le impediría concretar el proceso presidencial.
Felipe Fuentes Barrera
Y aunque nada está dicho, cada vez son más las voces que coinciden en que Fuentes Barrera podría ganar en su interés de reelegirse y mantener en sus manos las elecciones del 2021 y las presidenciales del 2024.
Fuentes Barrera quiere quedarse cuatro más en la silla de la presidencia a pesar haber encabezado una gestión polémica, con críticas y señalamientos de una cercanía con la llamada cuarta transformación, como imponerle a Morena la renovación de su dirigencia a través de una encuesta como lo propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador o negarle el registro de partido político a México Libre de Margarita Zavala y el expresidente Felipe Calderón.
Es tal el cabildeo de las últimas horas, que Fuentes Barrera ya le puso fecha a su informe de labores el cual será el 9 de noviembre, cuando su presidencia concluirá el 4 y debió hacerlo antes.
Sin embargo, la nueva presidencia no tendría unanimidad de votos, mucho menos si se trata de la reelección de Fuentes Barrera a quien no respaldarían la magistrada Janine Otálora y el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón quienes incluso, hace unas semanas lo acusaron de excederse de sus facultades y mover las fechas de resoluciones sin consulta alguna.
jlmr