Vecinos de Paseos de la Pradera viven en el olvido

Viven tensa calma y nadie quiere hablar del ataque armado del pasado domingo; “al fraccionamiento históricamente lo han olvidado los gobiernos”, dice su delegado

Seguirá pendiente una estrategia de mejora al entorno social luego del multihomicidio. (Francisco Villeda)
Francisco Villeda
Atotonilco de Tula /

Al fraccionamiento Paseos de la Pradera históricamente los gobiernos municipales de Atotonilco de Tula lo han olvidado a pesar de su densidad demográfica, y esto se ve reflejado entre otros rubros como el de la seguridad, pues aunque hay rondines los policías y patrullas asignados a la zona, los elementos son insuficientes para atender la alta incidencia delictiva.

Fernando Morales, delegado auxiliar de Quma interior, la zona en la que el pasado domingo se registró el ataque armado con saldo de seis personas asesinadas, entre ellas tres niños, señala que después del hecho violento hay una tensa calma aunque con temor, pues por la tranquilidad en la zona pareciera que no hubiera ocurrido nada, "sin embargo se percibe un ambiente de miedo y no es para menos, además, nadie quiere hablar al respecto".

Asimismo, dijo que la comunidad que representa es como cualquiera, con los mismos problemas, pero atajó que en Paseos de la Pradera los problemas son más visibles por la gran cantidad de personas agrupadas en un espacio relativamente pequeño, lo que origina, entre otras cosas, roces entre vecinos y más actos delictivos, en comparación con otros espacios más pequeños.

Arrastran carencias

Al poco tiempo de ser construido el fraccionamiento inició el abandono por parte de la administración local, toda vez que la ésta no atendió a la población ni tampoco lo hizo la inmobiliaria, por lo que los habitantes quedaron desprotegidos, “principalmente por una autoridad que no atiende de manera integral las problemáticas que se registran en esta región, pero que sí recibe sus impuestos sin demora alguna”.

Al respecto, el delegado explicó que el renglón de la seguridad pública es especial, ya que desde hace varias administraciones han pedido que se destine al lugar una base de policía y bomberos que ayude a despachar las emergencias en esta población, que de acuerdo con el Inegi en 2020 tenía 27 mil 400 habitantes; a pesar de la insistencia su súplica sigue sin tener eco en las autoridades.

Afirmó que hay patrullajes de la Policía municipal y cuando piden apoyo de la corporación lo tienen, “pero esas acciones emergentes, sostuvo, no son suficientes para una zona habitacional con una población tan numerosa”, e insistió en que se requieren múltiples unidades a disposición las 24 horas y ello no sucede. 

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