De Chiapas llegó la noticia a Malacatán, Guatemala, comunidad cercana a la frontera de Talismán, Chiapas en México. Darly Hernández, de 27 años de edad, esperaba que su pareja fuera sobreviviente, sin embargo la confirmación de que su esposo está dentro de la lista de los fallecidos fue un golpe demoledor.
Su esposo Carlos Federico Ovalle Cifuentes, de de 33 años, se fue del hogar hace ocho días. Le dijo a Darly que había juntado un dinero y que iba a intentar llegar a Estados Unidos. Pero el sueño se derrumbó, ahora ella es viuda a los 27 años de edad y con dos niñas, una de tres y otra de seis años de edad.
"Ahora mire quién me va a apoyar, yo siento que sola no voy a poder, mi nena ni ha empezado a estudiar, no sé qué haré", dice entre lágrimas mientras su mirada se pierde en el techo de lámina de su vivienda que apenas mide 3x5 metros.
Desde hace siete años, Carlos Federico era chófer de transporte público pero el salario no le alcanzaba, además buscaba agrandar su casa y darle lo mejor a su familia, salió con la esperanza de lograr un sueño y a su esposa le decía, “este espacio está muy pequeño, yo quiero que tengas tu propia cocina, quiero que mis hijas tengan su propio cuarto, decía, voy a luchar hasta mi último día de vida para darte algo, bonito, algo que tú te mereces”, cuenta entre sollozos .
El último mensaje que la pareja tuvo hace referencia a que Carlos Federico viajó a Chiapas pero ingresó por el lado de Comitán, que había conseguido un viaje en tráiler con otros migrantes.
“Me escribió diciéndome que iba a viajar en un tráiler con 100 personas más, a las 07:00 horas recibo su último mensaje diciéndome que me cuidara y cuidara a mis hijas y que si Dios lo permitía nos volveríamos a ver, pero eso ya no será posible”, señaló.
Darly y su familiares viven una doble agonía, pasan los días y no han podido contactar con las autoridades mexicanas ni de Guatemala, y no puede viajar a identificar oficialmente el cuerpo ni hacer el traslado por falta de dinero.
El padre de ella, y suegro del fallecido, Cándido Hernández, afirma que es una pérdida dolorosa, pues se perdió el pilar de esa familia, afirma que hay incertidumbre al no saber qué hacer en estos momentos, “no tenemos dinero para el traslado de él, le pedimos por favor al señor Presidente de México y Guatemala que nos ayuden porque la verdad andamos en la pobreza, él se fue por un sueño para sus hijas y mira lo que sucedió”, señaló.
Y mientras se junta algo de dinero para ver el traslado a Chiapas y los gastos de repatriación, Darly señala que aunque sabe que su esposo está muerto, quiere ver con sus propios ojos que el que está en la morgue es Carlos Federico.
“Yo tengo esa duda, necesito ver con mis propios ojos que es él, tengo esa necesidad de viajar para ver que el que está sin vida es mi marido, ya no sé qué hacer, ayúdenme por favor gobierno a que yo pueda ir a Chiapas, quiero ver sus señas particulares, su cicatriz y lunares, quiero ver que es quien ahora me deja con esta dura situación y cargando mi pena “ finalizó.
FS