Ana Lilia Rivera llama a romper ejercicio patriarcal del poder: "voto femenino no basta"

La presidenta del Senado sostuvo que el voto y el principio de paridad en el poder están destinados a ser el binomio que revolucionará la historia de México

Foro "70 Años del voto de las mujeres en México. Del sufragio a la paridad”.| (Especial)
Ciudad de México /

El derecho al voto de las mujeres es una victoria por sí misma, pero no basta para garantizar la igualdad, la justicia ni el bienestar de las personas, advirtió la presidenta del Senado de la República, Ana Lilia Rivera, quien llamó por ello a romper para siempre con el ejercicio patriarcal del poder.

Sostuvo que el voto y el principio de paridad en el poder están destinados a ser el binomio que revolucionará la historia de México.


Durante su participación en el foro "70 Años del voto de las mujeres en México. Del sufragio a la paridad”, en el Complejo Cultural Los Pinos, la legisladora de Morena subrayó que el voto femenino ha sido una de las grandes causas no solamente de las mexicanas, sino de las mujeres de todo el mundo.

"Pero no basta quedarnos en la exaltación de las virtudes del derecho a votar, pues por más que estemos convencidas de que aquel es una de las armas más potentes del pueblo, echar las campanas al vuelo y cruzarse de brazos sería un error que no tardaría en pasarnos la factura”, remarcó.


En ese contexto, Rivera informó que el 13 de noviembre vendrá a México un grupo de parlamentarios de Europa para conocer los avances de nuestro país en materia paritaria, pues “somos un ejemplo de democracia y de ciudadanía plena de las mujeres”.

"Se trata de un momento histórico, porque las mujeres integramos paritariamente las cámaras del Poder Legislativo, ocupamos la titularidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y del Instituto Nacional Electoral, y en 2024 por fin vamos a ocupar la Presidencia de la República”, puntualizó.

Afirmó, sin embargo, que la democracia no es un fin en sí mismo, sino un proceso continuo que requiere resultados palpables, porque la sombra del desencanto y la apatía yace siempre amenazante y lista para abrirle paso al autoritarismo o a la frivolidad política.

Por ello, el sueño democrático no puede quedarse en las glorificaciones del medio, por lo que es necesario asegurase de alcanzar su fin.

“Votar es una victoria por sí misma, pero no basta para garantizar la igualdad, la justicia ni el bienestar de las personas. Votar dentro de un sistema injusto, excluyente u opaco nunca derribará el sistema”, indicó la senadora.


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