El nuevo director del IMSS, Zoé Robledo, reconoció que no gastar en el instituto puede "no ser necesariamente un ahorro sino un fracaso de una acción de gobierno", pues la atención médica es fundamental, por lo que afirmó que lo que hará es garantizar que los recursos "se gasten bien".
Contrario a los argumentos que expuso Germán Martínez en su carta de renuncia sobre la falta de inversión en la compra de medicamentos, Zoé Robledo detalló que ya se ha ejercido el 93 por ciento de los recursos presupuestados en el primer trimestre y sería un error dejar de hacerlo.
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"El IMSS puede presentar una situación grave, porque no gastar en el IMSS no necesariamente es ahorro, puede ser un fracaso de una acción de gobierno y ahí es donde tenemos que atender los temas de corrupción, ver en dónde hay concentración en pocas empresas en las compras consolidadas, dónde hay compras a precios alzados, dónde puede existir una priorización equivocada sobre los suministros y medicamentos que más se requieren, frente a aquellos que a veces están concentrados en los centros de especialidad", dijo en la conferencia mañanera.
El funcionario aseguró que la atención médica es fundamental.
"En el primer trimestre, de los cerca de 64 mil millones de pesos presupuestados, se han gastado seis mil 979 millones de pesos; el 93 por ciento de lo presupuestado. Es decir, ha habido gasto en la compra de medicamentos, el reto mayor no es solamente gastarlo, es gastarlo bien, es gastarlo de manera más eficiente para que alcance para más. Es gastarlo acabando con la corrupción.
Zoé Robledo acompañó al presidente Andrés Manuel López Obrador en la conferencia de prensa mañanera y dijo que el reto es que cada peso que aporten tanto el gobierno federal como de las cuotas obrero-patronales "sean cuidados con un ánimo y un espíritu de saber que son sagrados", gastarlos "de manera eficiente, honrada y sin ningún menor viso de que pueda haber una situación de corrupción".
OVM